La canciller haitiana Dominique Dupuy denunció ante las autoridades internacionales las brutales escenas de redadas y deportaciones que se están llevando a cabo en la República Dominicana contra sus compatriotas. El gobierno dominicano está ejecutando operativos con la meta de deportar hasta 10,000 migrantes a la semana, lo cual ha causado indignación y preocupación por la violación de los derechos humanos y la dignidad de las personas afectadas. Dupuy calificó estas acciones como deshumanizantes y exigió respeto y justicia, declarando que la política migratoria del gobierno dominicano va en contra de los estándares internacionales de derechos humanos y del respeto a la dignidad humana.
El Consejo de Seguridad y Defensa Nacional de la República Dominicana, presidido por el presidente Luis Abinader, acordó la ejecución de un operativo para repatriar hasta 10,000 migrantes por semana con el fin de reducir la población migrante en las comunidades dominicanas. El gobierno aseguró que este operativo se llevará a cabo bajo estrictos protocolos que garanticen el respeto a los derechos humanos y la dignidad de los repatriados. El vocero de la Presidencia y director de Estrategia y Comunicación, Homero Figueroa, afirmó que el gobierno está comprometido en proteger la soberanía nacional y abordar los desafíos migratorios con una política que combine seguridad y respeto a los derechos humanos, en coordinación con la comunidad internacional y con un enfoque de cooperación regional.
Ante esta situación, el Gobierno haitiano continúa trabajando con sus socios para recibir a las personas afectadas con dignidad. Dupuy ha manifestado su preocupación por las acciones deshumanizantes que se están llevando a cabo en la República Dominicana y ha exigido respeto y justicia para sus compatriotas. La canciller haitiana ha informado a las autoridades internacionales sobre esta situación y ha condenado enérgicamente las redadas y deportaciones que se están llevando a cabo, considerándolas una violación a la dignidad humana y a los estándares internacionales de derechos humanos.
Mientras tanto, las autoridades dominicanas han afirmado que el objetivo del operativo es reducir el exceso de población migrante en las comunidades dominicanas, garantizando que se realice bajo estrictos protocolos que respeten los derechos humanos y la dignidad de los repatriados. El gobierno ha reafirmado su compromiso de proteger la soberanía nacional y abordar los desafíos migratorios con una política que combine seguridad y respeto a los derechos humanos. La situación ha generado críticas y preocupación en la comunidad internacional, con la canciller haitiana denunciando estas acciones como una afrenta a la dignidad humana y exigiendo respeto y justicia para sus compatriotas afectados.
En medio de esta controversia, la comunidad internacional sigue de cerca el desarrollo de la situación entre Haití y la República Dominicana, con preocupación por las violaciones a los derechos humanos y la dignidad de los migrantes haitianos. La diplomática haitiana ha informado a las autoridades internacionales sobre las brutales escenas de redadas y deportaciones que se están llevando a cabo en la República Dominicana y ha condenado enérgicamente estas acciones deshumanizantes. Mientras tanto, el gobierno dominicano ha defendido el operativo como una medida necesaria para abordar los desafíos migratorios y proteger la soberanía nacional, garantizando el respeto a los derechos humanos durante su ejecución. La situación sigue siendo objeto de críticas y debate en el ámbito internacional, con llamados a respetar los principios de dignidad y derechos humanos en todas las acciones migratorias.
