La campaña de la candidata demócrata a la Presidencia de Estados Unidos, Kamala Harris, ha anunciado que ha recaudado un total de 540 millones de dólares en el mes desde su presentación, lo que representa un récord para cualquier campaña de la historia. Este impulso económico se ha atribuido al entusiasmo generado por su discurso en la convención demócrata, que le ha permitido recaudar 40 millones en menos de tres días. En comparación, la campaña de Donald Trump comunicó que recaudó alrededor de 139 millones de dólares en julio.
La campaña de Harris ha atribuido este flujo de dinero a las donaciones sin precedentes de movimientos de bases en la última semana. Específicamente, un tercio del total de donaciones fue de personas que contribuían por primera vez, un 66 % de ellas mujeres y un 20 % jóvenes, a quienes consideran grupos decisivos. Además, se señaló que las profesiones más comunes entre los donantes son profesores y enfermeras. La jefa de campaña, Jen O’Malley Dillon, mencionó que la convención demócrata ha sido un momento galvanizador para la coalición Harris-Walz en todo el país.
En anticipación al Día del Trabajo, la campaña de Harris utilizará estos recursos y el entusiasmo para seguir con el impulso, comunicando incansablemente con los votantes de territorios clave cada día. La candidata y su número dos, Tim Walz, tienen programado hacer campaña en el estado clave de Georgia, con un discurso en solitario de Harris en la ciudad de Savannah. Después de la renuncia de Joe Biden a repetir mandato, la candidatura de Harris ha recibido un gran entusiasmo tanto del partido como de los votantes, logrando recaudar 200 millones en su primera semana oficializada.
Harris ha mejorado la posición de Biden en las encuestas y supera ligeramente a Trump. La campaña de este último ha achacado este éxito a una "fase de luna de miel" y anticipa un "rebote" a nivel nacional tras la convención demócrata, tratando de quitar relevancia al éxito de Harris evocando la candidatura de Hillary Clinton. Con un enfoque en los votantes de territorios clave, la campaña de Harris busca mantener su impulso y aprovechar el entusiasmo generado por la convención demócrata para acercarse a una eventual victoria en las elecciones presidenciales.