La comisión de diputados encargada de estudiar una reforma a la Ley de Cámara de Cuentas aún no ha presentado un informe sobre la iniciativa que lleva más de dos años en el Congreso. La iniciativa fue paralizada en enero, luego de ser aprobada en ambas cámaras, debido a que el Poder Ejecutivo sugirió correcciones antes de promulgarla. A pesar de que la comisión se ha reunido cuatro veces después de las últimas elecciones presidenciales y congresuales, aún no ha concluido con el estudio de la iniciativa ni con las observaciones del Ejecutivo, retrasando así la necesaria reforma a la Cámara de Cuentas.
El proyecto de reforma de las operaciones de la Cámara de Cuentas surgió a principios de 2022, cuando el senador Félix Bautista presentó un proyecto de ley que fue aprobado en la Cámara Alta y tuvo gran notoriedad en la sociedad tras los conflictos internos entre los cinco miembros titulares de la institución. Ante acusaciones de usurpación de funciones y falsificación de documentos entre los miembros titulares, una comisión bicameral de congresistas aceleró el proyecto de reforma de la institución y logró su rápida aprobación. Sin embargo, antes de ser promulgado, el Poder Ejecutivo devolvió la iniciativa al Congreso proponiendo sanciones más drásticas contra la corrupción.
La Cámara de Diputados decidió en enero que una comisión analizara las observaciones del gobierno, pero los trabajos se ralentizaron y hasta se detuvieron por la campaña electoral. Tras las elecciones municipales y congresuales de mayo, la comisión retomó los trabajos el 23 de mayo, pero aún no ha concluido con el estudio. El proyecto corre el riesgo de morir si no se promulga antes del 26 de julio, fecha en la que concluye el último período congresual del mandato actual que comenzó en 2020. La actual Ley de Cámara de Cuentas data de 2004, por lo que el proyecto en discusión en el Congreso busca modernizar las operaciones de la institución auditora para adaptarlas a la situación actual del país.
El Poder Ejecutivo propuso cambios al proyecto de ley, sugiriendo que las sesiones de la Cámara de Cuentas solo serán válidas si están presentes al menos tres de los cinco miembros titulares, y que en las sesiones extraordinarias deben estar presentes al menos cuatro funcionarios. Además, se propone que las resoluciones de las sesiones registren los votos de cada miembro titular y que el voto del presidente sea decisivo en caso de empate. Las observaciones del Ejecutivo buscan modificar las reglas de funcionamiento de la Cámara de Cuentas para garantizar una mayor transparencia y eficacia en su labor de fiscalización.
La necesidad de reformar la Cámara de Cuentas se hace evidente tras los conflictos internos entre sus miembros titulares y las acusaciones de corrupción. La falta de un informe por parte de la comisión de diputados encargada de estudiar la reforma refleja la complejidad y la importancia de este proceso. El tiempo apremia, ya que el proyecto corre el riesgo de expirar si no se promulga antes del 26 de julio. La modernización de las operaciones de la institución auditora es fundamental para fortalecer la transparencia y la lucha contra la corrupción en la República Dominicana.
