Stephen Curry, el jugador estrella de la selección de baloncesto de Estados Unidos, fue el héroe en la victoria de su equipo contra Serbia en las semifinales olímpicas al anotar 36 puntos. A pesar de su destacada actuación, Curry restó importancia a su desempeño individual y destacó la fortaleza de su equipo, señalando que "eso es lo bonito del equipo de EE.UU., cada día es alguien diferente". El jugador explicó que hizo lo que el partido necesitaba y que tenía mucha confianza en sí mismo durante el encuentro, en el que su equipo logró una ajustada victoria por 95-91 después de ir por detrás durante la mayor parte del juego.

Curry acertó 9 de 14 intentos de triple durante el partido y señaló que logró meter los primeros tiros, lo que le permitió "coger el ritmo". En el primer cuarto, anotó 17 de los 23 puntos de su equipo, lo que fue crucial para mantenerse cerca en el marcador. A pesar de llegar al descanso con una desventaja de 13 puntos, Curry destacó que en el tercer cuarto su equipo logró cambiar las cosas gracias a una gran defensa. El jugador de 36 años, considerado el mejor triplista de la historia de la NBA, ha ganado cuatro anillos de la NBA con los Golden State Warriors y sigue mostrando su calidad en la cancha.

Tras el partido, Curry elogió el desempeño de Serbia y reconoció que hicieron un gran partido con grandes tiros en la primera parte. Sin embargo, el jugador destacó la capacidad de su equipo para sobreponerse a la adversidad y encontrar la forma de salir adelante en un partido difícil. La victoria de Estados Unidos sobre Serbia en las semifinales olímpicas fue un logro importante para el equipo de Curry, que continúa demostrando su talento y liderazgo en la cancha.

En esta etapa de la competición olímpica, cada partido es crucial y la excelencia individual de jugadores como Curry puede marcar la diferencia en el resultado final. El jugador estadounidense ha demostrado una vez más su capacidad para liderar a su equipo en momentos clave y para desempeñarse a un nivel excepcional cuando más se necesita. Con su desempeño en la semifinal contra Serbia, Curry reafirmó su estatus como uno de los mejores jugadores de baloncesto del mundo y como un líder indiscutible en la cancha.

La presencia de Curry en el equipo de Estados Unidos no solo aporta habilidad y experiencia, sino también un espíritu competitivo y una actitud positiva que inspira a sus compañeros de equipo. Su liderazgo en la cancha y su capacidad para aparecer en los momentos decisivos lo convierten en un jugador clave para el éxito de su equipo en la competición olímpica. Con su actuación en la semifinal contra Serbia, Curry demostró una vez más por qué es considerado uno de los mejores jugadores de baloncesto de la actualidad y un referente en el deporte.

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