El Ejército israelí anunció que ha estado enfrentando "enfrentamientos a corta distancia" en el sur del Líbano desde que iniciaron su invasión terrestre, con la División 98ª y la fuerza aérea eliminando milicianos y desmantelando infraestructuras con municiones guiadas de precisión. Más de 150 infraestructuras, incluidos cuarteles generales de Hizbulá y almacenamientos de armas, han sido destruidas en ataques aéreos. Además, Hizbulá ha anunciado enfrentamientos contra soldados israelíes infiltrados en la localidad sureña de Maron al Ras, cerca de la línea divisoria.
El Ejército libanés confirmó la presencia de tropas israelíes a unos 400 metros de la Línea Azul en zonas como Harba Yaron y Bawaba al Eddessa, aunque se retiraron poco después. Israel continúa atacando objetivos de Hizbulá en el Líbano, como puestos de observación en la línea sur, y ha identificado el lanzamiento de cerca de 40 proyectiles contra la región norteña de la Alta Galilea. A pesar de los ataques, no se reportaron heridos o muertos por los cohetes interceptados, y también se interceptaron objetivos aéreos sospechosos provenientes del Líbano.
Hizbulá reivindicó más de una decena de ataques con cohetes, misiles o artillería contra posiciones y congregaciones de soldados en el norte de Israel, incluyendo la ciudad de Haifa. La invasión terrestre israelí en el Líbano se describe como "limitada y localizada" en el sur del país, aunque no se conoce el alcance real de la misma. A pesar de la escalada de tensiones y enfrentamientos, todavía no se ha informado sobre heridos o muertos en ninguna de las partes involucradas.
El conflicto en la región ha llevado a Israel y Hizbulá a protagonizar enfrentamientos en el sur del Líbano, con el Ejército israelí atacando infraestructuras y milicianos de Hizbulá, mientras que Hizbulá ha reivindicado ataques con cohetes en el norte de Israel. A pesar de la confirmación de tropas israelíes cerca de la Línea Azul en el sur del Líbano, el Ejército libanés informó que se retiraron poco después. Israel continúa sus ataques aéreos contra objetivos de Hizbulá en el Líbano, mientras que Hizbulá ha incrementado sus ataques contra Israel con cohetes y misiles.
La escalada de violencia ha llevado a un aumento en los enfrentamientos entre Israel y Hizbulá, con soldados israelíes involucrados en enfrentamientos a corta distancia en el sur del Líbano. Más de 150 infraestructuras han sido destruidas en ataques aéreos por parte de Israel, atacando cuarteles generales de Hizbulá y almacenamientos de armas. A pesar de la presencia de tropas israelíes cerca de la Línea Azul, el conflicto no ha provocado heridos o muertos, a pesar de múltiples ataques con cohetes por parte de Hizbulá en el norte de Israel.
El conflicto entre Israel y Hizbulá ha escalado en la región con enfrentamientos a corta distancia en el sur del Líbano, donde el Ejército israelí y la División 98ª han eliminado milicianos y desmantelado infraestructura con municiones guiadas de precisión. Hizbulá ha reivindicado ataques con cohetes y misiles contra posiciones y congregaciones de soldados en Israel, mientras que Israel continúa sus ataques aéreos contra objetivos de Hizbulá en el Líbano. A pesar de la intensificación de la violencia, hasta el momento no se han reportado heridos o muertos en ninguno de los enfrentamientos.
