Durante el primer trimestre de 2024, se registraron al menos 21 fallecimientos como resultado de disparos ejecutados por miembros de la Policía Nacional en la República Dominicana, en su mayoría en supuestos intercambios de disparos con presuntos delincuentes. Estas acciones fueron justificadas por la institución como una respuesta ante ataques de los individuos armados. En comparación con el mismo período del año anterior, se observó un aumento en el número de personas abatidas por la policía.
Entre los fallecidos en estos enfrentamientos se encuentran individuos con alias como "Cacharra", "Bemba", "Ula", "Carpuela", "Moreno Dollar" y "John Black", quienes eran buscados por diversos delitos como abuso sexual, robos, asaltos a mano armada, homicidios y tráfico de drogas. Estos individuos fueron descritos como peligrosos por las autoridades policiales y se les atribuían múltiples casos delictivos.
En algunos casos, como el tiroteo en el sector Kilombo en Consuelo, provincia San Pedro de Macorís, agentes de la policía ultimaron a un individuo identificado como "Bemba", quien previamente había herido a un oficial de la uniformada. Otro ejemplo es el caso del haitiano "Carpuela", vinculado a asesinatos por encargo, robos con violencia y tráfico de armas ilegales, quien fue abatido en la Autopista 6 de Noviembre.
La Policía Nacional también informó sobre la muerte de líderes de bandas criminales como "Moreno Dollar", acusado de liderar la banda "Los Fieros" y de cometer diversos delitos en varias provincias del país. En diferentes operativos, los agentes lograron abatir a individuos buscados por homicidios, robos y otros delitos graves, como "Kiko la Quema", responsable de una banda en San Cristóbal.
A lo largo del mes de marzo, se registraron múltiples enfrentamientos armados entre agentes de la Policía Nacional y delincuentes, resultando en la muerte de varias personas, incluyendo a individuos implicados en la muerte de dos jóvenes cristianos en la autopista Duarte. Estos sucesos representan una parte de la lucha contra la delincuencia y la violencia en la República Dominicana, donde las fuerzas del orden se enfrentan a bandas criminales peligrosas.
En resumen, el primer trimestre de 2024 en la República Dominicana estuvo marcado por un aumento en los enfrentamientos armados entre la Policía Nacional y presuntos delincuentes, resultando en un número significativo de fallecimientos en ambos bandos. Estas acciones forman parte de los esfuerzos de las autoridades para combatir la criminalidad y garantizar la seguridad de la población, aunque también plantean interrogantes sobre el uso de la fuerza letal en las operaciones policiales.