En el XXVI Encuentro Nacional de Líderes del Sector Agropecuario, más de 700 productores se reunieron para discutir ocho propuestas con el objetivo de garantizar la seguridad alimentaria en República Dominicana. Entre las conclusiones a las que llegaron se encuentra la necesidad de constituir un Fondo de Inversión para la Seguridad Alimentaria, manejado por el Banco Agrícola, con plazos razonables y tasas de interés competitivas. Además, sugirieron la emisión de un bono soberano del Ministerio de Hacienda a 20 años para conformar este fondo.
Otras propuestas incluyeron el fortalecimiento y ampliación del seguro agropecuario, incorporando un seguro paramétrico. También se insistió en la promulgación de un reglamento de aplicación para la Ley 368-22 de Ordenamiento Territorial, Uso de Suelo y Asentamientos Humanos, con el objetivo de delimitar los terrenos con vocación agrícola. Asimismo, se recomendó introducir al Congreso un proyecto de reforma legal e institucional del sector agropecuario, para actualizar y revisar el marco jurídico de las organizaciones del sector público vinculadas a esta actividad productiva.
Los productores destacaron la importancia de promover la expansión de la actividad agropecuaria para asegurar una mayor producción de alimentos en los próximos años. Durante el congreso, se intercambiaron experiencias y perspectivas sobre cómo suplir la demanda de millones de dominicanos, turistas, inmigrantes y mercados de exportación. El objetivo es lograr un sector agropecuario más eficiente y productivo, capaz de satisfacer las necesidades del país y sus mercados asociados.
Además de las propuestas mencionadas anteriormente, los productores también abogaron por la promulgación de un reglamento para la Ley de Ordenamiento Territorial y la incorporación de un seguro paramétrico al seguro agropecuario. Asimismo, se hizo hincapié en la necesidad de introducir reformas legales e institucionales en el sector agropecuario para modernizar su marco jurídico y fomentar su desarrollo. Estas medidas buscan fortalecer y aumentar la resiliencia del sector frente a posibles desafíos.
En este sentido, se busca mejorar la gestión y administración de los recursos agrícolas, así como fomentar la adopción de tecnologías y prácticas sostenibles en el sector. La implementación de estas propuestas contribuirá a fortalecer la seguridad alimentaria en República Dominicana, garantizando un suministro estable y suficiente de alimentos para la población. Además, se espera que estas medidas impulsen el crecimiento y la competitividad del sector agropecuario, generando beneficios económicos y sociales para el país en su conjunto.