Al menos 40 migrantes haitianos perdieron la vida y varios resultaron heridos después de que la embarcación en la que viajaban se incendiara frente a Cabo Haitiano, en el norte de Haití. La nave había salido con más de 80 personas rumbo a las Islas Turcas y Caicos, en un trayecto de 250 kilómetros, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM). El jefe de Misión de la OIM en el país, Grégoire Goodstein, mencionó que este trágico incidente resalta los riesgos a los que se enfrentan los migrantes y la necesidad de contar con rutas migratorias seguras y legales.
La embarcación había partido de Labadee con más de 80 personas y se dirigía hacia las Islas Turcas y Caicos, pero el incendio detuvo el viaje, informó la Oficina Nacional de Migración (ONM). Los guardacostas haitianos lograron rescatar a al menos 41 migrantes con vida, quienes reciben atención médica, alimentos, agua y apoyo psicosocial de la OIM. Once de ellos fueron trasladados al hospital más cercano para recibir tratamiento por quemaduras. La situación socioeconómica en Haití se ha deteriorado, lo que ha llevado a un aumento en las medidas desesperadas de la población, como la migración.
La extrema violencia en Haití en los últimos meses ha empujado a muchos haitianos a recurrir a la emigración como una forma de sobrevivir, debido a la falta de oportunidades económicas, el colapso del sistema sanitario, el cierre de escuelas y la ausencia de perspectivas. Para la mayoría de los haitianos, la migración regular es extremadamente difícil de considerar, lo que hace que muchos opten por viajes clandestinos, una elección particularmente peligrosa en la mayoría de los casos. Los guardacostas haitianos han observado un aumento en los intentos y salidas en barco desde finales de febrero, así como un aumento en el número de embarcaciones procedentes de Haití reportado por varios países de la región.
En el mes pasado, las autoridades migratorias de Estados Unidos informaron sobre la llegada de al menos 118 migrantes haitianos en un carguero de vela a Cayo Hueso, uno de los islotes de los Cayos de Florida en el extremo sur estadounidense. La migración irregular desde Haití y los riesgos asociados a ella continúan siendo una realidad preocupante, lo que subraya la importancia de establecer rutas migratorias seguras y legales para evitar más tragedias como la ocurrida frente a Cabo Haitiano. La OIM y otras organizaciones internacionales están trabajando para brindar apoyo a los migrantes afectados y abogar por soluciones a largo plazo para abordar las causas fundamentales de la migración forzada desde Haití.
