La boxeadora argelina Imane Khelif, campeona de los Juegos Olímpicos en una competencia controversial por su sexo, posó con sus guantes de boxeo y su medalla de oro en un centro de belleza en Argel que la celebra por su belleza más allá de su apariencia. El centro de belleza Beauty Code destacó que Khelif no necesitó preocuparse por su apariencia para lograr su medalla, y reivindicó su derecho a cambiar su imagen sin buscar encajar en los estándares impuestos por el mundo. Tras una polémica por ciberacoso, Khelif interpuso una denuncia en París para determinar quién inició la campaña misógina, racista y sexista en su contra.

Una vez de regreso en Argelia, Khelif fue recibida como una heroína y condecorada con la medalla de la Orden del Mérito por el presidente Abdelmadjid Tebboune, junto a otros dos medallistas argelinos. El reconocimiento de Khelif va más allá de su rendimiento deportivo, destacando su mensaje sobre la importancia de la esencia de una persona por encima de su apariencia. A pesar de haber sido descalificada del campeonato mundial del año pasado por la Asociación Internacional de Boxeo (IBA), Khelif logró imponerse en los Juegos Olímpicos y demostrar su talento sobre el ring.

El COI tomó la decisión sin precedentes de prohibir permanentemente a la IBA en los Juegos Olímpicos en 2023, debido a preocupaciones sobre su gobernanza, equidad competitiva y transparencia financiera. El presidente de la COI, Thomas Bach, defendió la participación de Khelif y la finalista Lin Yu-ting en las Olimpiadas, destacando que ambas nacieron, crecieron y compiten como mujeres. La Fiscalía de París abrió una investigación para determinar si los actos dirigidos contra Khelif constituyen delitos de ciberacoso, insultos públicos, provocación a la discriminación y difamación pública.

El centro de belleza Beauty Code elogió a Khelif como una estrella y una eterna favorita, comparándola con Hassiba Boulmerka, una atleta argelina icónica. Destacaron que Khelif puede ser femenina y elegante cuando quiera, pero que sobre el ring demuestra su verdadera esencia con estrategia, fuerza y determinación. La controversia en torno a su participación en los Juegos Olímpicos destaca la importancia de respetar la identidad de género de cada persona y combatir el ciberacoso y la discriminación en el ámbito deportivo.

Imane Khelif se ha convertido en un símbolo de resistencia y superación, demostrando que la fuerza y la determinación van más allá de la apariencia física. Su victoria en los Juegos Olímpicos ha puesto en evidencia la importancia de la igualdad y el respeto en el deporte, así como la necesidad de combatir los prejuicios y estereotipos de género. A través de su denuncia por ciberacoso y su lucha contra la discriminación, Khelif ha inspirado a muchas personas a seguir luchando por sus derechos y a celebrar la diversidad en todas sus formas.

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