Hugo Beras, exdirector del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), reveló los detalles del proceso de licitación para adjudicar el contrato a la empresa Transcore Latam, encargada de ejecutar el nuevo sistema semafórico del Gran Santo Domingo. Beras destacó que fue gracias a reuniones con el Poder Ejecutivo que se decidió buscar recursos para un proyecto de esta naturaleza, que abarcaba temas de tránsito, seguridad vial y transporte. A pesar de que el proyecto no estaba planificado ni presupuestado, Beras afirmó que todo marchaba de forma normal hasta que la Dirección de Compras y Contrataciones Públicas (DGCP) señaló indicios de irregularidades en el contrato con la compañía.
El exdirector explicó que se encargó de construir el pliego de condiciones que luego fue revisado y modificado por la DGCP, ya que no era su especialidad. Invitó a la Dirección General de Ética Gubernamental para que participara en la licitación y enviaran veedores, asegurando que el proceso se llevó a cabo de forma transparente. A pesar de una solicitud de suspensión por parte de la empresa ESC Group, que no participó en el proceso de licitación, el Tribunal Superior Administrativo falló a favor de continuar con el proceso. Tras recibir la notificación de la DGCP sobre supuestas irregularidades, Beras aseguró que todo continuó normal y se firmó el contrato con Transcore en junio de 2023 por un monto de RD$ 1,317,350,997.00.
El proceso de adjudicación y firma del contrato se realizó de acuerdo a las normas establecidas, con la participación de organismos de seguridad nacional en la verificación de los equipos licitados. Beras se sintió confiado y respaldado por tener a todas las personas necesarias supervisando el proceso. Sin embargo, la DGCP emitió una serie de advertencias que sorprendieron a Beras, quien tuvo que hacer frente a las acusaciones con un plazo de cinco días laborables. La DGCP hizo públicas las irregularidades, señalando que Transcore Latam alegó tener 19 años de experiencia, aunque se constituyó en 2022, y presentó documentos en inglés sin traducción durante el concurso.
A pesar de las acusaciones de la DGCP, Beras defendió la transparencia del proceso de licitación y firma del contrato con Transcore. El contrato, que tiene una vigencia de cinco años, fue registrado en la Contraloría General y se permitió que Beras llevara a cabo todos los procesos de adjudicación. A pesar de las dificultades, Beras se mantuvo firme en la defensa de la legalidad y transparencia de todo el proceso. La empresa Transcore se comprometió a llevar a cabo el proyecto de mejora de la red semafórica del Gran Santo Domingo, a pesar de las controversias surgidas durante el proceso de licitación.