La temporada de huracanes en el Atlántico está llegando a su fin con una actividad por encima del promedio y el huracán Helene marcado como el más destructivo del año después de tocar tierra en Florida con vientos de 220 kilómetros por hora. Helene provocó más de 150 muertes y dejó una estela de destrucción que alcanzó la zona montañosa de Carolina del Norte, siendo el huracán más mortífero en los Estados Unidos continentales desde Katrina en 2005.

Además de Helene, otro destacado huracán en esta temporada fue Beryl, un huracán de categoría 5, la máxima en la escala Saffir-Simpson, que tocó tierra en Texas como un huracán de categoría 1 y provocó inundaciones en Texas y Luisiana. También se destacó el huracán Milton, que tocó tierra en Florida como un huracán de categoría 3, causando lluvias torrenciales, inundaciones y un brote de tornados que produjeron 46 tornados.

La temporada de huracanes en el Atlántico de este año ha sido una de las más activas y destructivas registradas, con un total de 18 tormentas tropicales, once huracanes y cinco huracanes mayores, superando las previsiones de la NOAA. Esta temporada ha sido por encima del promedio, generando más tormentas con nombre, huracanes y huracanes mayores de lo normal. La NOAA indica que una temporada promedio genera 14 tormentas con nombre, siete huracanes y tres huracanes mayores.

Helene no solo fue el huracán más mortífero este año en los Estados Unidos, sino que también es el más poderoso que ha alcanzado la región del Big Bend de Florida. Helene tocó tierra en la costa floridana del Golfo de México el 26 de septiembre con vientos de 220 km/h, dejando tras de sí una estela de destrucción que afectó a Carolina del Norte. Por otro lado, Beryl fue un huracán de categoría 5 que tocó tierra en Texas como un huracán de categoría 1, causando inundaciones en Texas y Luisiana.

Otro huracán destacado de la temporada fue Milton, que tocó tierra en Siesta Key, Florida, como un huracán de categoría 3 y causó lluvias torrenciales, inundaciones y un brote de tornados. Milton también se caracterizó por una de las intensificaciones más rápidas, incrementando la potencia de sus vientos en 90 millas por hora en un período de 24 horas. La temporada de huracanes en el Atlántico de este año ha sido una de las más activas y destructivas registradas, con varios huracanes de gran impacto como Helene, Beryl y Milton.

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