El Gobierno dominicano ha acordado entregar 2,520.8 millones de pesos adicionales a la Junta Central Electoral (JCE) para que los partidos políticos puedan hacer campaña, pero no ha especificado de dónde saldrá ese dinero. Se plantea la posibilidad de modificar la Ley de Presupuesto para idear nuevas fuentes de financiamiento, lo que implicaría encontrar recursos a través de un aumento en las recaudaciones de impuestos o el incremento de la deuda pública, dos escenarios complejos. Expertos sugieren que el Gobierno podría recurrir al Banco de Reservas para obtener un préstamo con la garantía de que se incluirá en el presupuesto complementario a partir de julio. Sin embargo, esta modificación tendría que ser aprobada por el Congreso, donde ya surgen voces de oposición que se oponen a la medida.
Los reportes de la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) y de la Dirección General de Aduanas (DGA) muestran que las recaudaciones de impuestos en los primeros meses del 2024 han superado las proyecciones esperadas en algunos casos, pero no en otros. Mientras la DGII ha registrado ingresos por encima de lo estimado para el primer trimestre, la DGA ha fallado en cumplir con las metas recaudatorias. Esto plantea un desafío para el Gobierno en su intento por encontrar fuentes de financiamiento adicionales para los partidos políticos.
En los últimos 26 años, los partidos políticos en la República Dominicana han recibido más de 25,303 millones de pesos en contribuciones estatales para financiar sus operaciones y gastos de campaña. La distribución de estos fondos ha beneficiado principalmente a cinco organizaciones políticas, con el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) encabezando la lista con la mayor asignación presupuestaria. Le siguen el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), el Reformista Social Cristiano (PRSC), el Partido Revolucionario Moderno (PRM) y Fuerza del Pueblo (FP). Estos datos muestran la importancia del financiamiento estatal para la actividad política en el país.
La propuesta de aumentar el financiamiento para los partidos políticos ha generado controversia en el Congreso, donde ya se han expresado opiniones contrarias a la medida. El diputado de oposición Héctor Darío Féliz Féliz ha advertido que no apoyará un presupuesto destinado a gastos políticos, argumentando que el país ya está abrumado por la deuda. La discusión sobre cómo obtener los recursos necesarios para financiar las actividades de los partidos políticos sigue en curso, con diferentes posturas sobre la viabilidad y conveniencia de esta medida.
La búsqueda de nuevas fuentes de financiamiento para los partidos políticos en República Dominicana representa un desafío para el Gobierno, que debe encontrar una manera de garantizar recursos adicionales sin aumentar la carga impositiva o la deuda pública de manera desproporcionada. La modificación de la Ley de Presupuesto y la obtención de la aprobación del Congreso son pasos necesarios para llevar a cabo esta iniciativa, que ha generado críticas y preocupaciones entre algunos sectores de la sociedad. La transparencia y la rendición de cuentas en el manejo de los fondos públicos son aspectos clave en este debate.
En un contexto marcado por la búsqueda de equilibrio entre las necesidades de los partidos políticos y la estabilidad financiera del país, es crucial encontrar soluciones que permitan garantizar un proceso electoral justo y transparente sin comprometer la situación fiscal. La discusión sobre el financiamiento de las actividades políticas en República Dominicana refleja la complejidad de los desafíos económicos y políticos a los que se enfrenta el país, y la importancia de encontrar un consenso que permita avanzar hacia un sistema democrático sólido y sostenible.
