Representantes de organizaciones sociales y populares de Moca y Santiago protestaron contra la propuesta de reforma fiscal del Gobierno dominicano. En Santiago, los manifestantes se concentraron en el Monumento a los Héroes de la Restauración, a pesar del fuerte dispositivo policial desplegado en la zona. José Manuel Fernández destacó el apoyo a la manifestación, aunque muchos optaron por no participar por temor a represalias, calificando la acción como "temeraria y represiva". Fernández considera que el aumento de impuestos empeorará la situación de la sociedad dominicana y aboga por perseguir a los evasores y mejorar el gasto público antes de aplicar la reforma fiscal.
En Moca, decenas de personas se reunieron en el Monumento del Agricultor en rechazo a la reforma fiscal. Juan Compres, del grupo Los Peregrinos, advierte que la clase media desaparecerá si se implementa la reforma. Tanto en Santiago como en Moca, los manifestantes anunciaron que estas protestas son solo el comienzo de un movimiento de resistencia contra la reforma fiscal. Además, se planea una huelga en San Francisco de Macorís para los días 28 y 29 del mes en curso como forma de continuar la protesta contra la propuesta de reforma fiscal.
Los participantes en las protestas expresaron su descontento con la propuesta de reforma fiscal, argumentando que afectará negativamente a la clase trabajadora y a la clase media. Critican el aumento de impuestos a la renta y la ampliación del Impuesto a la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS), considerando que estas medidas solo contribuirán a empobrecer a la sociedad dominicana. Demandan que se persiga a los evasores fiscales y se mejore la eficiencia del gasto público antes de aplicar cambios fiscales que afecten a la población.
En medio de las protestas, se destaca la preocupación por el impacto que la reforma fiscal tendrá en la sociedad dominicana, especialmente en momentos en que la economía atraviesa dificultades. Los manifestantes expresan su hartazgo ante la actitud de los políticos que, según ellos, solo se preocupan por el pueblo durante las campañas electorales. Consideran que las autoridades deberían centrarse en buscar soluciones a la corrupción y la mala gestión de los recursos antes de aumentar la carga impositiva a la población.
Las manifestaciones en contra de la reforma fiscal reflejan una creciente oposición por parte de sectores de la sociedad dominicana que se sienten afectados por las medidas propuestas por el Gobierno. La movilización de diversas organizaciones sociales y populares en ciudades como Santiago y Moca muestra la voluntad de resistir y protestar contra lo que consideran un perjuicio para la clase trabajadora y la clase media del país. Con la planificación de futuras acciones, como la huelga en San Francisco de Macorís, se evidencia la determinación de continuar la lucha en contra de la reforma fiscal y buscar alternativas que protejan los intereses de la población dominicana.