La Oficina Nacional de la Defensa Pública (ONDP) ha detectado la preocupante situación de 480 presos en centros penitenciarios que no están recibiendo atención médica adecuada. El director de la institución, Rodolfo Valentín, ha instado al gobierno a tomar medidas urgentes para mejorar las condiciones de salud de estos reclusos. Propone la exclusión del Ministerio Público y la Policía Nacional del sistema penitenciario, ya que considera que no están cumpliendo adecuadamente con su labor en esa área.
El informe de la Defensa Pública revela una falta alarmante de acceso a tratamientos médicos y medicamentos esenciales para los presos, especialmente aquellos con enfermedades crónicas avanzadas como la diabetes. Esta situación pone en peligro la salud y dignidad de los internos, vulnerando sus derechos humanos fundamentales. La entidad ha formulado una serie de recomendaciones para mejorar las condiciones de vida y salud en los centros penitenciarios, incluyendo mejoras en infraestructura y equipamiento, adecuación de áreas médicas y mayor seguridad.
Entre las recomendaciones de la Defensa Pública se encuentra la segregación de los privados de libertad por género, tipo de delito y edad, así como la mejora de la seguridad en los centros penitenciarios para prevenir abusos y el uso excesivo de la fuerza. Se propone también dotar de vehículos para facilitar el traslado de los presos y promover una rehabilitación y reinserción social más efectiva. Además, se sugiere la instalación de laboratorios para pruebas analíticas y áreas de odontología en los centros penitenciarios.
La institución considera que es fundamental mejorar las condiciones de salud y vida de los presos en los centros penitenciarios, así como garantizar el respeto a sus derechos humanos. La exclusión del Ministerio Público y la Policía Nacional del sistema penitenciario se propone como una medida para lograr un mejor funcionamiento y velar por el bienestar de los internos. Se hace especial énfasis en la importancia de brindar atención médica adecuada a los presos con enfermedades crónicas.
En resumen, la situación de los presos en los centros penitenciarios del país es alarmante, con 480 reclusos que no están recibiendo atención médica adecuada. La Defensa Pública ha formulado una serie de recomendaciones para mejorar las condiciones de salud y vida en estos centros, incluyendo la exclusión del Ministerio Público y la Policía Nacional, mejoras en infraestructura y equipamiento, y la segregación de los presos por diversos criterios. Se busca garantizar el respeto a los derechos humanos de los internos y promover su rehabilitación y reinserción social efectiva.