La empresa Rose Art Deco S.R.L demandó por 100 millones de pesos al pelotero de Grandes Ligas, Vladimir Guerrero Jr, en reparación de daños y perjuicios, debido a un proyecto de construcción de una villa vacacional en Baní. El costo inicial acordado era de 40 millones de pesos, pero terminó sobrepasando los 100 millones debido a trabajos adicionales solicitados por la pareja del pelotero. La constructora alega que realizaron trabajos más allá de lo acordado en el contrato inicial y está representada legalmente por los abogados Manuel Olivero Rodríguez y Fernando Gutiérrez Figuereo.
El sometimiento de la demanda fue realizado por la gerente de la compañía, Rosa María de la Cruz, a través de los abogados Olivero Rodríguez y Gutiérrez Figuereo ante la Cámara Civil y Comercial de la provincia Peravia. Según los abogados, Vladimir Guerrero Jr se negó a pagar los trabajos adicionales realizados a solicitud de su pareja, alegando que ya había desembolsado los 40 millones de pesos iniciales. Incluso, a pesar de que el Colegio Dominicano de Ingenieros y Agrimensores (CODIA) evaluó la villa y comprobó los trabajos adicionales realizados, el pelotero se negó a pagar, lo que llevó a la constructora a demandarlo por 100 millones de pesos.
El Tribunal de Primera Instancia de la provincia Peravia descargó a la señora Rosa María de la Cruz y a la razón social Rose Art Deco SRL de una querella interpuesta por el pelotero, reconociendo que Vladimir Guerrero Jr debe la suma de cuarenta millones de pesos RD$40,000,000.00 según informes realizados por el CODIA. La gerente de la empresa afirmó que los representantes del pelotero divulgaron falsas acusaciones en medios radiales y redes sociales, lo que les llevó a perder órdenes de trabajo y proyectos en curso, casi llevándolos a la quiebra comercial.
La parte querellante afirma tener pruebas suficientes para demostrar los daños y perjuicios causados a la señora de la Cruz y a su empresa. La demanda en daños y perjuicios se encuentra siendo tramitada por la Cámara Civil y Comercial del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Judicial de la provincia Peravia. A pesar de la querella inicial del pelotero, el tribunal reconoció que Vladimir Guerrero Jr. debe pagar la suma adeudada y que no existen pruebas que justifiquen la querella penal en su contra.
A raíz de las acciones legales tomadas por ambas partes, se ha generado un conflicto entre la constructora y el pelotero, con acusaciones mutuas que han afectado la reputación y los negocios de ambas partes. La empresa demandante alega haber realizado trabajos adicionales más allá de lo acordado en el contrato inicial, mientras que el pelotero se niega a pagar por estos trabajos. La disputa legal continúa en curso ante la Cámara Civil y Comercial, donde se espera que se resuelva la cuestión de los daños y perjuicios reclamados por la empresa demandante.
