El viceministro de Gestión Migratoria y Naturalización del Ministerio de Interior y Policía de la República Dominicana, Juan Manuel Rosario, rechazó las acusaciones de Amnistía Internacional sobre violaciones a los derechos humanos de los extranjeros en el país. Consideró estas afirmaciones como una "vulgar injerencia" en los asuntos internos de la nación y aseguró que no permitirán que organismos internacionales interfieran en su política migratoria. Rosario destacó la importancia de mantener la soberanía del Estado dominicano en este tema y afirmó que seguirán deportando inmigrantes ilegales hacia Haití por considerarlo un asunto de nación.
En una entrevista con el periodista Elvis Lima en el programa televisivo "Fuera de Récord", el funcionario dejó en claro que la República Dominicana no aceptará ninguna intromisión en sus asuntos internos por parte de Amnistía Internacional u otros organismos internacionales. Insistió en que el país debe seguir aplicando su política migratoria de manera firme, haciendo énfasis en la preservación de sus prerrogativas soberanas como sujeto del derecho internacional. Rosario subrayó que la soberanía interna del país es un atributo exclusivo del pueblo dominicano, especialmente en lo que respecta al territorio, la población, las leyes y la constitución.
El viceministro cuestionó el constante intento de algunos sectores, tanto internacionales como nacionales, de socavar el derecho soberano de la República Dominicana a establecer su política migratoria. Lamentó la presencia de grupos que realizan un "lobby" permanente con la intención de influir en las decisiones relacionadas con este tema. Rosario enfatizó la importancia de que los organismos internacionales, como Amnistía Internacional, respeten la voluntad del Estado dominicano y reconozcan su derecho a determinar su propia política migratoria y de nacionalidad.
Las declaraciones del viceministro reflejan la postura del gobierno dominicano de defender su soberanía y autonomía en materia migratoria. Rosario destacó que la República Dominicana tiene el derecho legítimo de proteger sus fronteras y regular la entrada y permanencia de extranjeros en su territorio. Afirmó que seguirán deportando a los inmigrantes ilegales hacia Haití como parte de su política migratoria y de seguridad nacional, rechazando cualquier intento de presión o injerencia externa en este sentido.
En medio de las acusaciones de Amnistía Internacional y otros organismos internacionales, Juan Manuel Rosario ha reafirmado la postura firme del gobierno dominicano en relación con su política migratoria. La defensa de la soberanía nacional y la autonomía en la toma de decisiones sobre inmigración son los pilares de la posición del viceministro y del Estado dominicano en este delicado tema. A pesar de las críticas y presiones externas, la República Dominicana parece decidida a mantener su curso en materia migratoria y a proteger sus fronteras y población de manera independiente y soberana.
