Un estudio reciente presentado en la Sesión Científica Anual del Colegio Americano de Cardiología ha descubierto que fumar cigarrillos electrónicos aumenta el riesgo de sufrir insuficiencia cardíaca. Aunque aún no ha sido publicado, el estudio cuenta con un gran tamaño de muestra y una amplia cantidad de datos que respaldan esta afirmación, lo que indica la urgencia de estudiar esta relación más a fondo.
La insuficiencia cardíaca es una enfermedad que afecta a más de seis millones de estadounidenses y se caracteriza por la incapacidad del corazón para bombear sangre de manera eficiente, lo que puede provocar síntomas debilitantes y hospitalizaciones frecuentes, especialmente en personas mayores. Los cigarrillos electrónicos, que se han considerado como una alternativa más segura al tabaco tradicional desde su introducción a finales de la década de 2000, suministran nicotina en forma de aerosol sin combustión.
El estudio se basó en datos y registros sanitarios electrónicos de un gran estudio nacional dirigido por los Institutos Nacionales de Salud, que buscaba analizar la relación entre el uso de cigarrillos electrónicos y nuevos casos de insuficiencia cardíaca. Los resultados mostraron que las personas que habían consumido cigarrillos electrónicos tenían un 19% más de probabilidades de desarrollar insuficiencia cardíaca en comparación con aquellas que nunca los habían usado.
Los investigadores tuvieron en cuenta diversos factores de riesgo, como la edad, el sexo, el consumo de otras sustancias, como el tabaco y el alcohol, para calcular esta proporción. Otros estudios en animales y seres humanos han mostrado vínculos entre el consumo de cigarrillos electrónicos y factores de riesgo de insuficiencia cardíaca, aunque no de forma concluyente debido a limitaciones en los diseños de estudio anteriores.
El estudio destaca la necesidad de realizar más investigaciones sobre las posibles repercusiones del vapeo en la salud cardíaca, especialmente debido al aumento en el consumo de cigarrillos electrónicos entre los jóvenes. Además, enfatiza que los cigarrillos electrónicos no deben utilizarse como una herramienta para dejar de fumar, y señala que la combinación de asesoramiento y medicamentos es la estrategia más efectiva para abandonar este hábito, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos.
Aunque el estudio no demuestra de manera concluyente la relación entre los cigarrillos electrónicos y la insuficiencia cardíaca, los investigadores advierten que los resultados indican que existe una relación entre ambos. Esto subraya la importancia de investigar más a fondo los efectos del vapeo en la salud cardíaca, especialmente en vista de la creciente popularidad de los cigarrillos electrónicos en la población más joven.
