Un joven acusado de matar a una adolescente en la República Dominicana la sedujo con la promesa de regalarle un teléfono celular. Acordaron reunirse el lunes 8 de julio en La Romana, donde el joven la recogió en una motocicleta y la llevó a su casa. Una vez allí, le dijo que el teléfono prometido estaba en espera de que se transfirieran los datos desde la laptop. Sin embargo, tras un supuesto proceso de transferencia, el joven golpeó a la adolescente en la cabeza, la estranguló y escondió su cuerpo en un saco.
Después de cometer el crimen, el joven compró suministros para camuflar el cadáver de la adolescente antes de transportarlo en su motocicleta. Durante su traslado, hizo una parada en un puesto de empanadas, donde compró algunas antes de arrojar el cuerpo en un precipicio en Cajón de Cisneros. Luego, continuó su camino, informando a su novia parcialmente sobre lo sucedido. Comentó que se dirigió a Santo Domingo y más tarde a la provincia de Santiago, donde finalmente fue detenido por las autoridades.
Durante el allanamiento en la casa del acusado, se encontraron evidencias que relacionaban directamente a Bryan Joseph con el crimen. Se halló un rollo de soga roja debajo de la cama, un pantalón con manchas rojas posiblemente de sangre, entre otros elementos incriminatorios. El cuerpo de la adolescente fue trasladado a la morgue, mientras que las evidencias ocupadas se encuentran en manos de la Policía Científica. Se espera que el acusado sea sometido a la justicia en las próximas horas.
El presunto asesino confesó parte de lo sucedido con la muerte de la adolescente a su novia antes de huir de la escena del crimen. Además, aprovechó su trabajo como cajero en un Instituto de Formación Técnico Profesional para sustraer una cantidad considerable de dinero antes de escapar. Tras un recorrido que lo llevó de Santiago a la Dirección Central de la Policía Nacional en La Romana, el joven enfrenta ahora las consecuencias de sus actos ante la justicia.
El macabro crimen conmocionó a la comunidad, revelando la crueldad y premeditación con la que el acusado planeó y ejecutó el asesinato de la adolescente. El hallazgo del cuerpo de la joven y las evidencias recolectadas en la casa del presunto asesino se suman al horror de esta terrible historia. La cooperación de las autoridades, la unidad canina K-9 y la labor de la Policía Científica son fundamentales para esclarecer este caso y llevar al acusado ante la justicia para que responda por sus acciones. La sociedad dominicana espera una rápida y certera actuación de las autoridades en la investigación y enjuiciamiento de este atroz crimen.
