En su informe de gestión del Senado correspondiente al período comprendido entre agosto de 2023 y julio de 2024, se revisaron 443 expedientes que detallan los desembolsos del Fondo de Asistencia Social, también conocido como barrilito. Estos expedientes fueron entregados por las oficinas senatoriales de los 29 legisladores que reciben mensualmente estos fondos. La revisión de los expedientes permitió un manejo adecuado de los fondos y se constató que el dinero se utilizó de manera transparente. El barrilito tiene un costo anual para el Estado de RD$252,852,000 y solo tres senadores han renunciado a estos beneficios por considerarlos inapropiados para su función de legisladores.

Los senadores que actualmente no reciben el barrilito son Faride Raful, Eduardo Estrella y Antonio Taveras, mientras que el resto de los legisladores agotaron su gestión 2020-2024 recibiendo estos recursos millonarios. La distribución del barrilito se realiza según un cálculo que otorga más dinero a los senadores que representan provincias con mayor población, como San Cristóbal, Duarte, Puerto Plata, La Vega y San Pedro de Macorís. Estos fondos de asistencia social, creados en 2006, se entregan mensualmente a los senadores de forma discrecional, permitiéndoles utilizar el dinero según su criterio sin reglas o limitaciones establecidas.

A pesar de las críticas sobre la falta de transparencia en el barrilito, tanto los senadores actuales como los electos que serán juramentados próximamente han defendido su continuidad argumentando que estos recursos les ayudan a resolver problemas en las provincias que representan en el Congreso. Aunque ha habido propuestas para eliminar el barrilito tanto desde el Senado como desde el Gobierno, ninguna ha prosperado y los fondos continúan intactos desde su creación en 2006. Este fondo de asistencia social ha sido objeto de debate y polémica en la República Dominicana.

En el informe de gestión del Senado se destaca que la revisión de los expedientes del barrilito permitió un manejo adecuado de los fondos y demostró que el dinero se utilizó de manera transparente. A pesar de los cuestionamientos sobre la falta de claridad en el uso de estos recursos, los senadores argumentan que el barrilito les permite atender las necesidades de sus provincias. Aunque ha habido intentos de eliminar este fondo de asistencia social, hasta ahora no han tenido éxito y los senadores siguen recibiendo estos fondos sin restricciones.

El barrilito, como fondo de asistencia social del Senado, genera controversia en la República Dominicana debido a la forma en que se distribuyen y utilizan estos recursos. Aunque solo tres senadores han renunciado a estos beneficios, la transparencia en el manejo del barrilito sigue siendo una preocupación para algunos sectores de la sociedad. A pesar de las críticas y propuestas para eliminar este fondo, hasta el momento no se ha logrado avanzar en su eliminación, lo que mantiene vigente este polémico mecanismo de asistencia social en el Congreso dominicano.

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