Un segundo avión vinculado al gobierno de Nicolás Maduro está retenido en la República Dominicana a solicitud de las autoridades estadounidenses. La aeronave, un Falcon 200 EX con matrícula YV 3360, se encuentra en el Aeropuerto Internacional Joaquín Balaguer y tiene prohibido moverse sin autorización judicial. Esta es la segunda aeronave vinculada al gobierno de Maduro que ha sido requerida por Estados Unidos bajo las sanciones de la OFAC contra Venezuela. Al igual que la anterior, que fue incautada por las autoridades estadounidenses, este avión vino al país hace meses para recibir mantenimiento.

En agosto de 2019, el expresidente Donald Trump emitió la Orden Ejecutiva 13884, que prohíbe a los estadounidenses participar en transacciones con personas que actúan en nombre del gobierno venezolano, incluido el régimen de Maduro. Según la investigación estadounidense, personas afiliadas a Maduro utilizaron una empresa fantasma en el Caribe para ocultar su participación en la compra ilegal del avión Falcon 900EX a una empresa de Florida. Esta ilegalidad llevó a la confiscación del avión en República Dominicana por parte de las autoridades estadounidenses.

El gobierno de Estados Unidos incautó un segundo avión utilizado por Maduro, esta vez un Dassault Falcon 900EX adquirido de forma ilegal por 13 millones de dólares a través de una empresa fantasma del régimen venezolano en el Caribe. El avión fue confiscado en República Dominicana debido a las sanciones impuestas a Venezuela. Diario Libre visitó el aeropuerto Joaquín Balaguer para documentar la presencia del Falcon 2000EX, pero la aeronave se encontraba en el interior de un hangar y no era accesible sin autorización de AMS Aircraft Maintenance Solutions, la empresa encargada de la gestión de la zona.

La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) condenó la confiscación del avión por parte de Estados Unidos, calificándola de "secuestro". La organización afirma que el avión confiscado se suma a una larga lista de agresiones por parte de las administraciones estadounidenses para ejercer presión sobre el gobierno del país caribeño. Este hecho ha generado controversia y reacciones en diferentes sectores, tanto a nivel nacional como internacional.

La retención de aviones vinculados al gobierno de Nicolás Maduro en República Dominicana ha puesto de manifiesto las tensiones políticas entre Estados Unidos y Venezuela. Las sanciones impuestas por la OFAC y la confiscación de aviones utilizados por el régimen de Maduro reflejan el conflicto internacional en el que se encuentra inmerso el país sudamericano. La presencia del Falcon 200EX en el aeropuerto Joaquín Balaguer ha generado interés y preocupación en la región, mientras que las condenas y reacciones de organizaciones como ALBA evidencian la complejidad de las relaciones internacionales en la actualidad.

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