El sector empresarial se prepara para acudir al Congreso Nacional para debatir sobre temas importantes que consideran no fueron tomados en cuenta en el proyecto de Ley de Modernización Fiscal. El impacto del "paquete fiscal" preocupa a los directivos de la AIRD, quienes señalan que provocará un aumento de precios, desincentivará la inversión extranjera y frenará la economía. Según Julio Virgilio Brache, el gobierno informó a los industriales sobre la reforma, pero no detalló las vías de recaudación ni los recortes necesarios, lo que consideran una falta de profundización en un tema crucial para la economía local.

Los efectos de la modernización fiscal se sentirán en los sectores productivos a través de la eliminación del artículo 50 de la Ley de Proindustria, ampliación de la base del Itbis, posibles aumentos en la energía eléctrica e impuestos selectivos. Brache señala que la mayoría de las empresas que se benefician de la Ley de Proindustria son pequeñas y medianas y podrían verse afectadas gravemente. Se busca un equilibrio entre la recaudación y la inversión para no sobrecargar a las empresas y permitir el crecimiento.

Contrario a lo expresado por el ministro de Hacienda, José Manuel Vicente, sobre la ejecución gradual de la reforma, Mario Pujols, vicepresidente ejecutivo de la AIRD, critica la rapidez con la que se lleva a cabo el proceso. Señala que hay un castigo al sector industrial, que aporta significativamente al PIB y a los impuestos internos. La presión tributaria sobre la industria es alta y superior al resto de la economía. Además, el sector genera empleos formales y exporta productos a numerosos países.

Para los empresarios, la propuesta de reforma fiscal actual no permitirá duplicar el PIB para 2036, como se propuso anteriormente. La falta de alineación de las señales enviadas por el gobierno con una reforma que afecta la industria local provoca que los inversionistas consideren buscar otros lugares para colocar sus capitales. Una empresa dominicana ha reducido una inversión programada hasta aclarar la situación fiscal. La incertidumbre generada por la reforma fiscal afecta negativamente la inversión y el crecimiento económico a largo plazo.

En resumen, el sector empresarial dominicano se muestra preocupado por los efectos del proyecto de Ley de Modernización Fiscal, que consideran impactará negativamente en la economía local. La falta de detalles sobre las vías de recaudación y recortes necesarios genera incertidumbre en el sector industrial, que aporta significativamente al PIB y a los impuestos internos. Los empresarios piden un equilibrio entre la recaudación y la inversión para evitar un impacto negativo en el crecimiento económico a largo plazo. La falta de alineación entre las señales enviadas por el gobierno y una reforma que afecte la industria local genera preocupación en los inversionistas y podría llevar a una reducción de la inversión en el país.

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