El robo de ganado en la frontera entre la República Dominicana y Haití continúa siendo un problema preocupante para los ganaderos de Dajabón. Recientemente, Teodoro Muñoz, expresidente de la junta distrital de Capotillo, fue víctima de robo, perdiendo varias vacas paridas y un toro de raza Hosting de alto valor. El robo ocurrió alrededor de las cuatro de la madrugada del domingo, y Muñoz logró rastrear su ganado en la ciudad de Juana Méndez en Haití, donde de los 11 animales robados, solo lograron trasladar siete al país vecino.
Este incidente ha generado preocupación entre los productores y ganaderos de la zona, quienes ven con inquietud la falta de control en la frontera. Ante la aparente falta de acción por parte de las autoridades, Muñoz tuvo que emprender una investigación por cuenta propia y desplazarse hasta Haití en busca de su ganado. La inseguridad en la frontera preocupa a los ganaderos de Capotillo, mientras que las autoridades aseguran mantener la situación bajo control. El director distrital de Capotillo, Jarín Gómez, menciona que en la comunidad solo hay tres militares en el cuartel, y se queja de que dedican más tiempo a combatir el contrabando de cigarrillos que a perseguir a los ladrones de ganado.
Este tipo de incidentes no son aislados en la región, con casos de robo de ganado siendo reportados con cierta frecuencia. Los ganaderos se ven afectados por la falta de seguridad en la zona fronteriza, lo que les obliga a tomar medidas por su cuenta para proteger sus propiedades. La falta de control en la frontera entre la República Dominicana y Haití crea un ambiente propicio para este tipo de delitos, poniendo en riesgo la sustentabilidad de las actividades ganaderas en la zona.
Ante esta situación, los ganaderos y productores de la zona esperan que las autoridades refuercen la seguridad en la frontera y tomen medidas efectivas para prevenir el robo de ganado. La presencia de más efectivos militares y un mayor control fronterizo son algunas de las medidas sugeridas para hacer frente a este problema. Mientras tanto, los ganaderos como Teodoro Muñoz se ven obligados a enfrentar la inseguridad por su cuenta, realizando investigaciones y desplazándose hasta territorio haitiano para recuperar su ganado robado.
Se espera que estas acciones ayuden a disminuir la incidencia de robos de ganado en la frontera, protegiendo así la economía de los productores ganaderos de la zona. La colaboración entre República Dominicana y Haití en materia de seguridad fronteriza también podría ser clave para abordar este problema de manera integral. En definitiva, la inseguridad en la frontera entre ambos países sigue siendo un desafío para los ganaderos de la región, que buscan soluciones efectivas para proteger sus medios de vida y garantizar la sustentabilidad de sus negocios.
