El papa Francisco expresó su solidaridad con los enfermos de la viruela del mono o mpox en todo el mundo y pidió a los Gobiernos y laboratorios que brinden una adecuada asistencia médica a todos. Durante el rezo del Ángelus dominical en el Palacio Apostólico, el pontífice argentino afirmó que reza por los contagiados, especialmente en países como la República Democrática del Congo, y expresó su apoyo a las iglesias locales. Instó a los gobiernos y empresas privadas a compartir tecnología y tratamientos disponibles para garantizar que nadie se quede sin atención médica adecuada.
La Organización Mundial de la Salud ha declarado el estado de alerta sanitaria a nivel internacional por la viruela del mono, una enfermedad infecciosa que puede provocar inflamación de ganglios y erupciones cutáneas dolorosas o con picazón. En África, se han registrado cerca de 21.500 casos de mpox y 591 fallecimientos a causa de esta enfermedad desde el inicio del año en trece países, según datos de la Unión Africana. La situación es preocupante y requiere de acciones urgentes para contener la propagación y brindar el tratamiento necesario a los afectados.
El papa Francisco hizo un llamado a la solidaridad y a la cooperación internacional para combatir la viruela del mono y asegurar que todos los enfermos reciban la atención médica que necesitan. Destacó la importancia de compartir tecnología y tratamientos entre gobiernos y empresas privadas para garantizar que no haya falta de recursos en la lucha contra esta enfermedad. Su mensaje resalta la necesidad de trabajar juntos para enfrentar desafíos globales en materia de salud pública.
La situación de emergencia sanitaria provocada por la viruela del mono requiere de una respuesta coordinada a nivel mundial para contener la propagación de la enfermedad y brindar asistencia médica a los afectados. El llamado del papa Francisco a los gobiernos y laboratorios para colaborar en la provisión de tratamientos y tecnología es fundamental para hacer frente a esta crisis de salud pública. Es necesario actuar con rapidez y eficacia para evitar un mayor número de contagios y fallecimientos por mpox.
La solidaridad y la cooperación son fundamentales para enfrentar la viruela del mono y otras enfermedades infecciosas que representan una amenaza para la salud global. El llamado del papa Francisco a trabajar juntos en la provisión de tratamientos y tecnología es un recordatorio de la importancia de la colaboración internacional en la promoción de la salud y la prevención de enfermedades. Es necesario unir esfuerzos para garantizar el acceso a la atención médica y contener la propagación de enfermedades como la viruela del mono.
El mensaje de solidaridad y compromiso del papa Francisco con los enfermos de la viruela del mono resalta la importancia de la atención a la salud como un derecho fundamental de todas las personas. Su llamado a los gobiernos y laboratorios para ofrecer una adecuada asistencia médica a todos los afectados es una muestra de su compromiso con la justicia social y la equidad en el acceso a la salud. Es necesario seguir trabajando juntos para enfrentar los desafíos sanitarios globales y asegurar que nadie se quede sin la atención médica que necesita.