El Proyecto Agricultura Resiliente y Gestión Integrada de Recursos Hídricos (PARGIRH) tiene como objetivo beneficiar a 5.6 millones de tareas cultivadas en las cuencas hidrográficas de Yaque del Norte y Ozama Isabela, con más de 75,000 agricultores. Se busca mejorar los agro-ecosistemas, conservar áreas protegidas, rehabilitar presas y mejorar sistemas de riego y saneamiento. El plan fue presentado al Banco Mundial el 9 de septiembre, con una financiación de 80 millones de dólares que serán supervisados por el Ministerio de Economía y el Gabinete del Agua. El proyecto impactará a siete provincias, entre ellas Montecristi, Santiago Rodríguez, Valverde, Santiago, La Vega, Monte Plata y Santo Domingo, y será ejecutado por varias entidades gubernamentales.

El director ejecutivo del Instituto Nacional de Recursos Hídricos destacó la importancia de preparar a los productores agrícolas y a las poblaciones vulnerables en las zonas cercanas a las presas para hacer frente al cambio climático y mejorar el saneamiento. El proyecto busca impactar positivamente a las comunidades de Sabana Iglesias y Monción, que contaminan las presas de Taveras y Monción. Se plantea la construcción de una planta de tratamiento y un sistema sanitario en estos municipios para mejorar la calidad de vida de sus habitantes. El trabajo del proyecto se llevará a cabo a lo largo de esta semana con reuniones de trabajo coordinadas por el INDRHI.

El consultor del proyecto presentó un análisis técnico que incluyó el proceso de consultas públicas con los diversos actores de las cuencas impactadas, la disposición de los Instrumentos de Salvaguardas Ambientales y Sociales requeridos, y el acuerdo con el Ministerio de Medio Ambiente para la creación y funcionamiento del Consejo de Cuencas Hidrográficas. Se ha previsto la dotación de equipos especializados a cada institución para fortalecer y operar el proyecto. La presentación se llevó a cabo en el Hotel Dominican Fiesta con intervenciones de personalidades del Ministerio de Economía, el Consejo Directivo del proyecto y la economista agrícola senior del Banco Mundial.

El proyecto PARGIRH es considerado transversal y busca impactar positivamente a las comunidades y los recursos hídricos en las provincias beneficiadas. La importancia de la gestión integrada de los recursos hídricos y la agricultura resiliente se destaca como clave para enfrentar los desafíos del cambio climático y mejorar la calidad de vida de las poblaciones locales. La cooperación entre diversas instituciones gubernamentales y la financiación proporcionada por el Banco Mundial permitirán la implementación exitosa del proyecto a lo largo de los próximos años, beneficiando a miles de agricultores y comunidades en República Dominicana.

La agricultura resiliente y la gestión integrada de recursos hídricos son fundamentales para garantizar la sostenibilidad de las actividades agrícolas y la conservación de los ecosistemas en República Dominicana. El proyecto PARGIRH representa un esfuerzo conjunto entre varias instituciones gubernamentales y el Banco Mundial para mejorar la productividad agrícola, proteger las áreas naturales y garantizar el acceso a agua de calidad para las poblaciones locales. Se espera que la implementación exitosa de este proyecto tenga un impacto positivo a largo plazo en las comunidades beneficiadas y contribuya al desarrollo sostenible del país.

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