Usuarios y empresas de diferentes industrias esenciales alrededor del mundo se recuperan de un apagón informático provocado por una actualización defectuosa de un software de CrowdStrike en el sistema operativo Windows 10 de Microsoft. Este error llevó a los equipos a quedar atascados en la "pantalla azul de la muerte", afectando a sectores como la banca, la aviación, los medios de comunicación y la salud. George Kurtz, director general de CrowdStrike, explicó que la empresa brindó soporte a los clientes para obtener las últimas actualizaciones y resolver el problema.
A pesar de la magnitud global de la caída de los sistemas informáticos, se confirmó que no se trató de un ciberataque, sino de un fallo aislado en la actualización de los controladores de Falcon de CrowdStrike. La caída de Azure, la plataforma de computación en la nube de Microsoft, provocó la aparición de pantallazos azules en todo el mundo, lo que llevó a la necesidad de reiniciar servidores. Kurtz se disculpó por las interrupciones y aseguró que el problema ya fue resuelto, aunque algunos clientes podrían tardar en volver a operar.
El sector más afectado por el error de Microsoft fue el transporte aéreo. Las principales aerolíneas del mundo, como American Airlines, Delta y United, se vieron obligadas a cancelar o retrasar vuelos a nivel global, lo que provocó largas filas en los aeropuertos. Más de 31,000 vuelos se retrasaron y alrededor de 3,600 fueron cancelados en Estados Unidos, mientras que diversos aeropuertos de Europa, Asia y Oceanía también experimentaron problemas.
En Latinoamérica, países como Argentina, Panamá, República Dominicana, Perú, Honduras y Chile sufrieron una afectación mínima por el apagón informático, con sus aerolíneas operando con normalidad en su mayoría. En Asia y Oceanía, aerolíneas en Emiratos Árabes Unidos, Kuwait y Baréin reportaron problemas informáticos limitados, mientras que los aeropuertos de Sídney y Melbourne en Australia lograron restablecer sus sistemas con normalidad.
Además de las aerolíneas, otros sectores como bancos, instituciones, organismos y hospitales se vieron impactados por la falla informática de Microsoft. En diferentes países, se reportaron interrupciones en el sistema de pago de supermercados, las cajas registradoras de negocios y el funcionamiento de hospitales. Empresas alemanas como Deutsche Bank y Deutsche Telekom también enfrentaron los efectos del fallo, al igual que la bolsa de Londres y la cadena de televisión Sky en el Reino Unido.
En América, el apagón global tuvo un impacto desigual, afectando principalmente a Estados Unidos y Canadá en los sectores de aviación y salud. En países latinoamericanos como México y Brasil, se reportaron problemas menores, manteniendo la estabilidad en las operaciones críticas. Instituciones de salud en EE.UU. como Kaiser Permanente y hospitales en Houston enfrentaron interrupciones en el acceso a la información de los pacientes, mientras que en Canadá, bancos, aeropuertos y hospitales resultaron afectados por la falla de Microsoft.
