El Ministerio de Defensa (MIDE) confirmó que tenía un contrato con Jochi Gómez para suministrar tecnología en materia de seguridad nacional, pero lo rescindió en septiembre de 2024. Gómez había revelado que tenía un acuerdo con el Ministerio de Defensa desde el primer gobierno de Luis Abinader, pero la institución aclaró que el contrato se firmó en junio de 2020, antes de que Abinader asumiera el cargo. La empresa de Gómez es Aurix y según él, era el único contrato privado que tenía el Ministerio de Defensa en seguridad nacional. Gómez también es propietario de Transcore Latam, que operaba la red de semáforos en otro acuerdo con el Gobierno, y que actualmente está siendo investigado por presuntas irregularidades.
El Ministerio de Defensa aseguró que el contrato con Aurix nunca se ejecutó, ya que la institución decidió descartar la cooperación con dicha empresa y no puso en vigencia el acuerdo. El MIDE nunca solicitó la información comprometida por la empresa ni realizó ninguna de las acciones pactadas en el contrato. Tras la designación de un nuevo Ministro de Defensa en agosto de 2024, se revisó la existencia del acuerdo de cooperación con Aurix y se decidió formalmente rescindir la cooperación porque no era necesaria. La empresa Aurix se comprometía a suministrar tecnología en materia de seguridad nacional, pero la institución decidió que la cooperación no era requerida.
El escándalo por el contrato con Transcore Latam, ascendente a 1,317 millones de pesos, llevó al extitular del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), Hugo Beras, a solicitar una licencia del cargo y ser sustituido por el presidente. En noviembre del año pasado, se anunció la suspensión del contrato con Transcore Latam, pero la empresa no apagó la red semafórica como se había prometido. A finales de agosto de 2024, los aparatos de tránsito no funcionaron, lo que causó caos en el Distrito Nacional. El Intrant anunció la rescisión definitiva del acuerdo con Transcore Latam y la acusó de sabotear la red semafórica. La empresa y sus vínculos con Jochi Gómez están siendo investigados por presuntas irregularidades.
En medio de estas controversias, Jochi Gómez ha estado en el centro de la atención pública. Además del contrato con el Ministerio de Defensa en materia de seguridad nacional, Gómez también está vinculado a Transcore Latam, empresa que ha sido señalada por presuntas irregularidades en su contrato con el Gobierno. La rescisión de este contrato ha generado indignación entre la población, especialmente por el caos provocado en el tránsito como consecuencia de la falta de funcionamiento de la red semafórica en el Distrito Nacional. Las investigaciones en torno a estos contratos y las posibles implicaciones legales para los involucrados están en curso, con la justicia siendo llamada a esclarecer la situación y determinar las responsabilidades de cada parte en este escándalo.