La sentencia de la Suprema Corte de Justicia de 10 millones de pesos a favor de un paciente que contrajo una bacteria en el hospital Ney Arias Lora, ha impactado en la protección de los derechos de los pacientes y en la responsabilidad de los centros de salud. El abogado Gilberto Objío Subero, especializado en derecho médico, asegura que esta decisión envía un claro mensaje sobre la necesidad de un entorno de atención médica seguro y de calidad, estableciendo importantes precedentes en términos de responsabilidad patrimonial de la administración y el deber de cuidado en el sector salud.
Objío Subero mencionó que la sentencia destaca las consecuencias de una infección nosocomial y la importancia de proporcionar un entorno seguro que prevenga riesgos adicionales para la salud. Subrayó que la inacción o el incumplimiento de los protocolos de higiene y control de infecciones pueden tener consecuencias legales significativas para las instituciones de salud. Además, resalta la responsabilidad patrimonial de la administración, estableciendo que las entidades públicas y los centros de salud públicos deben compensar a los individuos por los daños causados por su funcionamiento o inacción, a través de indemnizaciones por daños materiales y morales, así como intereses judiciales.
La indemnización ordenada por la corte refleja la aplicación de este principio y la importancia de adoptar y seguir rigurosamente los protocolos de higiene y control de infecciones en los centros de salud. La resolución judicial también destaca la interpretación flexible y orientada a la justicia de los plazos procesales, especialmente en casos donde los daños sufridos por la víctima son de naturaleza continuada. La decisión de la SCJ en este caso sirve como un recordatorio y una advertencia a los centros de salud sobre la importancia de promover una mejora en las prácticas de salud pública, con el fin de prevenir futuros casos de infecciones nosocomiales.
En una entrevista, Objío Subero enfatizó que la sentencia de la SCJ tiene un impacto significativo en la atención médica segura y de calidad, destacando la necesidad de garantizar un entorno seguro en los centros de salud para prevenir riesgos adicionales para la salud de los pacientes. La corte rechazó la defensa del hospital sobre la caducidad de la acción por presentarse fuera del plazo legal de dos años, basado en la ocurrencia de daños continuados que renuevan el plazo para recurrir, lo cual es un aspecto crucial de la sentencia.
En resumen, la sentencia de la Suprema Corte de Justicia a favor del paciente que contrajo una bacteria en el hospital Ney Arias Lora destaca la importancia de proteger los derechos de los pacientes y la responsabilidad de los centros de salud en proporcionar un entorno seguro y de calidad. Esta decisión establece precedentes importantes en términos de responsabilidad patrimonial de la administración y el deber de cuidado en el sector salud, promoviendo una mejora en las prácticas de salud pública y la prevención de futuros casos de infecciones nosocomiales.
