El director general de la Policía Nacional Haitiana, Rameau Normil, ha declarado que las bandas armadas que causan terror en el país ya no tendrán más espacio, prometiendo recuperar los territorios ocupados por estas organizaciones. En una conferencia de prensa conjunta con el comandante en jefe de la Fuerza Multinacional de Asistencia a la Seguridad, el general Godfrey Otunga, Normil anunció nuevas acciones contra las bandas armadas para restablecer la paz en Haití y pidió la cooperación de la población para lograrlo.
Normil adelantó que en los próximos días se llevarán a cabo operaciones contra las bandas armadas en el país, con estrategias innovadoras que permitirán a los agentes del orden volver a sus puestos para garantizar la seguridad de la población. El jefe policial informó que se han llevado a cabo reuniones entre el Alto Mando de la Policía Nacional y los jefes de las fuerzas policiales keniatas presentes en el país, con el objetivo de planificar acciones coordinadas.
Además, la PHN anunció que ha recuperado el control del Hospital Universitario Estatal de Haití, conocido como Hospital General, como primer paso en la lucha contra las bandas armadas. Estos grupos habían asaltado el centro hospitalario recientemente, pero tras una operación exitosa, las fuerzas de élite lograron recuperar el control de las instalaciones. Esta acción se suma a los esfuerzos por restaurar la seguridad en un contexto donde la violencia y el caos reinan en las calles de Puerto Príncipe.
El panorama actual en la capital haitiana es desolador, con casas, instituciones y universidades saqueadas e incendiadas. El abandono es tal que la vegetación comienza a crecer en las calles que antes estaban llenas de vida y actividad. El primer ministro haitiano, Garry Conille, ha dado un ultimátum a las bandas armadas para que depongan las armas, advirtiendo que el Estado no espera indefinidamente a que lo hagan. La situación en el país requiere medidas urgentes para restablecer la paz y la seguridad.
En junio, llegó a Haití un contingente inicial de policías de Kenia como parte de un grupo de 1,000 agentes de ese país que se sumarán a fuerzas de seguridad de otras naciones para formar una misión multinacional. El objetivo de esta misión es ayudar a las autoridades haitianas a recuperar el control del país y enfrentar el desafío de las bandas armadas que operan con impunidad. La colaboración internacional es crucial para abordar la crisis de seguridad en Haití.
Ante este escenario de violencia y caos, las autoridades haitianas y la comunidad internacional deben unir esfuerzos para restaurar la tranquilidad en el país. La atención se centra en desarticular las bandas armadas que han sembrado el terror entre la población, promoviendo acciones conjuntas y estrategias innovadoras para recuperar el control de los territorios ocupados. La colaboración de la población es fundamental para lograr este objetivo y restablecer la paz en Haití.
