La brisa y oleaje del huracán Beryl afectaron las zonas turísticas de Andrés y Boca Chica en la provincia Santo Domingo, dejando escombros y daños en algunos negocios. En Andrés, la playa se encuentra cubierta de escombros, raíces de cocoteros al descubierto y negocios con gran cantidad de arena. Algunas casetas fueron destruidas completamente, mientras que otras sufrieron daños parciales. Empleados de establecimientos comerciales trabajan en la limpieza y relleno de arena en la parte frontal de los negocios, incluso utilizando palas mecánicas para devolver la arena que fue arrastrada por la brisa de Beryl.
En Boca Chica, a pesar de la limpieza de la playa, pocos turistas se encuentran disfrutando de sus aguas para combatir el calor generado por la humedad. Sin embargo, miles de personas en el país se encuentran sin servicio eléctrico debido a los daños ocasionados por el huracán. Beryl, de categoría 4, avanza hacia Jamaica dejando a su paso daños que afectaron la distribución y generación eléctrica según las autoridades locales.
La situación en las zonas turísticas de Santo Domingo refleja la magnitud de los impactos dejados por el huracán Beryl. En Andrés, la presencia de escombros y daños en los negocios muestra la fuerza de la brisa y oleaje, dejando a la vista las raíces de los cocoteros y muchos metros de arena que desaparecieron de la playa. Por su parte, en Boca Chica, los turistas aún pueden disfrutar de la playa, pero la falta de electricidad en muchas zonas del país es un recordatorio constante de la devastación causada por el huracán.
A medida que los empleados de los establecimientos comerciales en las zonas afectadas trabajan en la limpieza y reconstrucción de los negocios, se espera que la normalidad regrese pronto. La utilización de palas mecánicas y otros equipos para devolver la arena a la playa es una muestra del esfuerzo que se está realizando para recuperar los espacios turísticos dañados por Beryl. A pesar de los obstáculos, los turistas que visitan Boca Chica pueden disfrutar de sus aguas y contribuir así a la reactivación de la economía local.
El huracán Beryl, además de dejar daños materiales y cortes de energía eléctrica, ha generado preocupación en la región debido a su avance hacia Jamaica. Las autoridades locales están en alerta y trabajando en medidas preventivas para proteger a la población de posibles nuevos impactos. A medida que el huracán se aleja de República Dominicana, el enfoque se centra en la recuperación y reconstrucción de las zonas afectadas para poder recibir nuevamente a los turistas y reactivar la economía local.
En medio de la devastación causada por el huracán Beryl, la solidaridad y el trabajo conjunto de la comunidad son fundamentales para afrontar la crisis y recuperar la normalidad. Los esfuerzos de limpieza y reconstrucción en las zonas turísticas afectadas muestran la determinación de las autoridades y de la población en superar los desafíos y seguir adelante. Con medidas preventivas y una adecuada planificación, se espera que la recuperación sea pronta y que las zonas turísticas de Santo Domingo puedan volver a recibir a los visitantes con seguridad y tranquilidad.
