El Gobierno de Haití ha anunciado la decisión de enviar más policías y soldados de élite para frenar la violencia de las bandas armadas y mejorar la seguridad en el país. El primer ministro, Garry Conille, ordenó la retirada de cientos de efectivos que estaban asignados a la protección de personalidades para desplegarlos en las zonas de combate. Además, se reunirá con socios internacionales para solicitar una mayor cooperación en respaldo de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas de Haití.

Miembros del Consejo Presidencial de Transición y el primer ministro se reunieron con el comandante en jefe de las Fuerzas Armadas Haitianas y el director general de la Policía Nacional para coordinar esfuerzos en el restablecimiento del orden en todo el país. La presencia de bandas armadas en Puerto Príncipe y otras ciudades de provincia es una preocupación constante. Conille convocó un encuentro urgente con las fuerzas de seguridad y miembros del Gobierno para abordar la situación de seguridad en curso, particularmente en Puerto Príncipe y la región de Artibonite.

El Gobierno ha declarado que no cederá distritos estratégicos como Solino y otros que han sido recientemente liberados de bandas criminales. Se está trabajando en nuevas estrategias para recuperar el control de las zonas ocupadas por estas bandas. Se está reforzando la capacidad operativa de la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas para hacer frente a la violencia que afecta a la población haitiana. El primer ministro ha mostrado su solidaridad con las fuerzas de seguridad y ha expresado su compromiso de actuar de manera estratégica y efectiva para enfrentar la situación.

A pesar del despliegue de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad, liderada por Kenia y respaldada por la ONU, la violencia en Haití no cesa. En el primer semestre del año se han registrado unas 3.900 víctimas entre muertos y heridos, continuando una tendencia de violencia que ha afectado a miles de personas en años anteriores. La situación es preocupante y requiere de un esfuerzo conjunto tanto a nivel nacional como internacional para lograr restablecer el orden y la seguridad en el país.

La violencia de las bandas armadas en Haití ha llevado al Gobierno a tomar medidas concretas para hacer frente a esta situación. El retiro de efectivos de unidades de élite para desplegarlos en zonas de combate, la coordinación con socios internacionales y el fortalecimiento de la capacidad operativa de las fuerzas de seguridad son parte de los esfuerzos para restablecer la seguridad en el país. La situación en Puerto Príncipe y otras regiones afectadas por la violencia es alarmante y requiere de una respuesta inmediata y efectiva.

El Gobierno de Haití, junto con la comunidad internacional, busca encontrar soluciones a la escalada de violencia en el país. La violencia de las bandas armadas ha provocado la huida de cientos de personas de sus hogares y ha generado un clima de inseguridad generalizada. La cooperación entre todas las partes involucradas, incluyendo las fuerzas de seguridad y las autoridades gubernamentales, es fundamental para lograr una pronta mejoría en la situación de seguridad en Haití. La población haitiana sigue enfrentando desafíos importantes debido a la violencia que impera en el país, y es necesario un esfuerzo conjunto para superar esta crisis y restablecer la tranquilidad en la nación caribeña.

Compartir.
Exit mobile version