El presidente Luis Abinader tiene previsto anunciar una propuesta para fusionar ministerios y eliminar entidades públicas que duplican funciones o han cumplido sus objetivos originales. El gobierno, a través del Ministro de Administración Pública Sigmund Freund, recientemente reveló planes para un amplio proceso de reestructuración estatal. Esto involucrará la fusión de ciertos ministerios y la eliminación de entidades que se superponen con otras o han completado su misión original. Una de las fusiones bajo consideración es entre el Ministerio de Educación (Minerd) y el Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (Mescyt), ambos dentro del sector educativo.
Sin embargo, esto ha generado debate, con figuras como Ligia Amada Melo criticando el posible movimiento. También se especula sobre la creación de un Ministerio de la Familia, que combinaría el Ministerio de la Juventud, el Ministerio de la Mujer y el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani). Varios otros sectores, incluyendo agricultura y salud, están bajo revisión. En el sector agrícola, agencias como el Instituto Dominicano del Azúcar y el Instituto Agrario Dominicano podrían ser consolidados.
En el sector de la salud, se podrían ver reducciones en instituciones como el Consejo Nacional de VIH y SIDA y el Servicio Nacional de Salud. El estado dominicano actualmente consta de 366 instituciones, incluyendo 282 centralizadas y 84 organismos descentralizados, con una parte significativa bajo revisión para consolidación o eliminación. La medida busca una mayor eficiencia en el gobierno y una optimización de los recursos estatales.
Se espera que esta reestructuración mejore la eficiencia del gobierno y contribuya al uso más efectivo de los recursos del Estado. Además, la fusión de ministerios y la eliminación de entidades duplicadas podrían conducir a una mayor concentración de esfuerzos y recursos en áreas prioritarias. Sin embargo, la propuesta ha generado críticas y debates, especialmente en sectores específicos que podrían ser directamente afectados por los cambios propuestos en los ministerios y organizaciones públicas.
Es fundamental considerar cómo estos cambios impactarán en la prestación de servicios a la población y en el funcionamiento de los sectores clave como educación, salud, y agricultura. A medida que se anuncian más detalles sobre la propuesta de reestructuración, se espera que haya un mayor debate y discusión sobre cómo garantizar que los cambios beneficien al país en su conjunto. La reorganización del Estado plantea desafíos pero también oportunidades para mejorar la eficiencia y efectividad de la administración pública en la República Dominicana.