En la noche del 1 de diciembre de 2023, agentes de Cesfront detuvieron a un hombre con 756,000 unidades de cigarrillos en Manzanillo, Montecristi. En meses anteriores, la DGA detectó cinco millones de cigarrillos camuflados en televisores en el Aeropuerto Internacional de Las Américas, y el Cesfront también detuvo a otro individuo con 490,000 unidades en Elías Piña. Estos decomisos son parte de los esfuerzos de las autoridades contra el comercio ilícito, que afecta tanto a las recaudaciones del Estado como a las empresas legales. Sin embargo, las mafias persisten y logran introducir las mercancías al mercado.

El contrabando de cigarrillos se da por todos los puntos de entrada al país, incluyendo cruces fronterizos, puertos y aeropuertos. En marzo de 2024, la DGA destruyó 54 millones de cigarrillos, valuados en 321 millones de pesos. Las marcas más embargadas son Capital, Jaisalmer, Point, Camme II Faut y Gold City, que satisfacen la demanda de consumidores que representan el 13% de la población, según la Sociedad Dominicana de Cardiología. La presencia de cigarrillos ilegales en el mercado se evidencia en la venta de la marca Capital a precios más bajos en algunos colmados de Santo Domingo.

El modus operandi de los comerciantes ilegales incluye mantener a la vista los cigarrillos legales, mientras que los ilegales están ocultos debajo del mostrador. Sin embargo, un equipo encubierto de Diario Libre verificó que en algunos establecimientos los cigarrillos de contrabando están accesibles para los consumidores. A pesar de las inspecciones realizadas por Pro Consumidor, el contrabando de cigarrillos continúa prosperando en el país, especialmente en las provincias fronterizas.

El contrabando de cigarrillos ha dejado de percibir al Estado dominicano alrededor de 29,000 millones de pesos entre 2013 y 2021. La AIRD muestra preocupación por la situación, señalando un crecimiento anual del 36% en cigarrillos ilegales entre 2015 y 2023. La falta de acción legal contundente contra los contrabandistas dificulta el combate a este problema, a pesar de las penas establecidas en la Ley 17-19.

A pesar de los decomisos realizados por la DGA y Cesfront, las estadísticas muestran que el contrabando de cigarrillos continúa siendo un problema grave en la República Dominicana. La falta de condenas ejemplares a los traficantes dificulta la lucha contra este comercio ilícito. Para enfrentar esta problemática, el gobierno ha implementado medidas como la entrega de camionetas al Ceccom y la construcción de una verja perimetral en la frontera. Además, se han establecido acuerdos entre el sector público y privado para combatir el contrabando y fortalecer la seguridad jurídica y competitividad del sector industrial del país.

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