El cacao dominicano se enfrenta a nuevos desafíos en el mercado europeo, donde se exige más información sobre el origen del fruto para garantizar que su producción esté libre de deforestación y degradación forestal. La Unión Europea ha establecido restricciones para siete rubros, incluyendo el cacao, a partir de diciembre de 2024, lo que podría afectar las exportaciones del país. Ante esta situación, la Junta Agroempresarial Dominicana (JAD) y la fundación española Codespa han lanzado el programa piloto "Cacao Trace" para fortalecer las capacidades empresariales de 700 pequeños productores de cacao en Monte Plata.
El programa busca implementar un protocolo de certificación de trazabilidad y "deforestación cero" para aquellos productores que cumplan con los requisitos establecidos por la Unión Europea. Con un financiamiento de 940,191.61 euros de la UE y el respaldo del Ministerio de Agricultura, se pretende geolocalizar las fincas de los beneficiarios e implementar tecnología blockchain para que los consumidores internacionales puedan saber si el chocolate que consumen es orgánico y libre de deforestación. Este es el primer proyecto en el país que busca certificar a un sector agrícola como libre de deforestación, con la intención de replicarlo en otras provincias.
El certificado de trazabilidad y "deforestación cero" será fundamental para mantener las exportaciones de cacao al mercado europeo. La delegada de Codespa en la República Dominicana destacó la importancia de acompañar a los productores para que cumplan con las regulaciones europeas y puedan acceder a mejores condiciones en el mercado. Además del cacao, la Unión Europea ha impuesto restricciones a otros rubros como café, soya, carne bovina, palma aceitera, madera y caucho, en un esfuerzo por reducir la deforestación a nivel mundial.
El director ejecutivo de la JAD explicó que la adopción de estas nuevas reglas representa una oportunidad para que los agricultores dominicanos modernicen su producción y la hagan más sostenible, destacando que los cacaotales dominicanos consisten en plantaciones antiguas que se han desarrollado sin deforestación. A pesar de que las exportaciones de cacao disminuyeron en el año anterior, la República Dominicana cuenta con una importante superficie destinada al cultivo de cacao, siendo este fruto una parte significativa de su ecosistema forestal.
El reglamento de la Unión Europea 2023/1115 establece una serie de requisitos para los países exportadores, incluyendo la gestión de aspectos sociales, la identificación y gestión de riesgos del producto, la georreferenciación de fincas y sistemas de monitoreo, así como herramientas de trazabilidad. Este enfoque busca asegurar que los productos importados a la UE provengan de producciones sostenibles y libres de deforestación. Con iniciativas como "Cacao Trace", la República Dominicana busca adaptarse a estas nuevas regulaciones y mantener su presencia en el mercado europeo como un productor de cacao de calidad y sostenible.
En resumen, el cacao dominicano debe enfrentar nuevos desafíos en el mercado europeo, donde se exige más información sobre su origen y producción para garantizar la sostenibilidad y evitar la deforestación. Con programas como "Cacao Trace", se busca certificar a los productores de cacao como libres de deforestación, cumpliendo con los requisitos de la Unión Europea y asegurando la continuidad de las exportaciones. La adopción de estas nuevas reglas representa una oportunidad para modernizar la producción de cacao en la República Dominicana y mantener su presencia en el mercado internacional.