Este fin de semana, la República Dominicana conmemoró el 64 aniversario del asesinato de las hermanas Mirabal y Rufino de la Cruz, un trágico evento orquestado por la dictadura de Rafael Trujillo. La ceremonia fue organizada por la Comisión Permanente de Efemérides Patrias junto a varios organismos gubernamentales y tuvo lugar en la Carretera Luperón en Tamboril, donde las víctimas fueron asesinadas y su vehículo empujado por un acantilado para simular un accidente. El evento solemne comenzó con el izamiento de la bandera nacional en el Ayuntamiento de Tamboril, seguido de una invocación religiosa, ofrendas florales y discursos destacando la significancia perdurable del sacrificio de las hermanas Mirabal por la democracia y la libertad.
La Gobernadora Civil, Rosa Santos, elogió el valor de las hermanas, mientras que Juan Pablo Uribe, presidente de Efemérides Patrias, enfatizó el impacto del martirio en el futuro democrático de la nación y su reconocimiento como símbolo internacional de resistencia. Uribe también presentó una biografía, "Vida y Heroísmo del Mártir Dominicano Rufino de la Cruz", escrita por Luis Fausto Disla, llamándola un reconocimiento pendiente del heroísmo compartido de De la Cruz. En su discurso, Uribe describió a De la Cruz como encarnando la honestidad, el coraje y la solidaridad, afianzando su lugar en la memoria patriótica de la nación. El evento incluyó reconocimientos a contribuciones locales, con el empresario Remberto Estrella honrado por mantener el monumento histórico y el exalcalde Francisco Álvarez acreditado por su construcción. Actuaciones artísticas de estudiantes de escuelas locales añadieron vitalidad a la ocasión, reforzando el recuerdo colectivo de este momento crucial en la historia dominicana.
