Dos hermanos dominicanos en El Bronx se enfrentaron a un atracador mientras regresaban a casa después de trabajar. El incidente tuvo lugar en la intersección de Fordham Road con la avenida Morris. Durante el altercado, el asaltante sacó un arma y disparó a ambos hermanos frente al 2449 de la avenida Morris. Michael Méndez, de 33 años, y su otro hermano Chris, de 38, resultaron heridos de varios disparos. A pesar de que fueron llevados rápidamente al hospital, Michael falleció y Chris se encuentra en estado crítico, según la policía.
En el área del tiroteo viven las víctimas, así como cientos de familias dominicanas, incluyendo propietarios de negocios. El sector se considera peligroso, y la Policía de Nueva York ha ofrecido una recompensa de $3,500 dólares a quien brinde información sobre el paradero del pistolero responsable del ataque. Este incidente se suma a otros recientes actos de violencia contra miembros de la comunidad dominicana en la zona.
En un hecho relacionado, hace poco más de una semana, otro dominicano identificado como Miguel D’oleo, de 29 años, fue asesinado a tiros y otros tres compañeros resultaron heridos en un tiroteo perpetrado por desconocidos a bordo de motocicletas. El suceso tuvo lugar en la esquina de las avenidas Mt. Eden con Townsend, a varias cuadras de donde ocurrió la tragedia contra los hermanos Méndez. Los agresores huyeron del lugar antes de que pudieran ser capturados.
La violencia armada en El Bronx, especialmente contra miembros de la comunidad dominicana, ha generado preocupación entre los residentes y autoridades locales. La presencia de armas de fuego en manos de delincuentes ha llevado a un aumento en los tiroteos y asesinatos en la zona, afectando la seguridad de los vecindarios y la vida de los residentes. Las autoridades han intensificado sus esfuerzos para prevenir y combatir este tipo de incidentes, así como para capturar a los responsables y llevarlos ante la justicia.
La comunidad dominicana en El Bronx se muestra consternada por estos ataques y exige mayores medidas de seguridad por parte de las autoridades para proteger a los residentes. Se han organizado manifestaciones y protestas para llamar la atención sobre la violencia en la zona y exigir acciones concretas para abordar el problema. La solidaridad y el apoyo mutuo entre los residentes dominicanos se ha fortalecido en respuesta a estos eventos trágicos, mientras luchan por un ambiente más seguro y pacífico en sus barrios.
En medio de la incertidumbre y el miedo que genera la violencia armada en la comunidad dominicana de El Bronx, los residentes buscan formas de protegerse y colaborar con las autoridades para prevenir futuros ataques. La cooperación ciudadana y la denuncia de comportamientos sospechosos se han convertido en herramientas clave en la lucha contra la delincuencia en la zona. A pesar de los desafíos, la comunidad dominicana se mantiene unida y decidida a enfrentar la violencia y construir un futuro más seguro para todos sus integrantes.