El ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Diosdado Cabello, realizó declaraciones duras contra el rey emérito de España, Juan Carlos I, el cual calificó como un ladrón que se "robó hasta las cerraduras". Cabello también criticó la figura de un rey en la actualidad, considerándola una "estupidez" y un retroceso, sin proporcionar argumentos sólidos para respaldar su afirmación. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha insistido en que España debería pedir perdón por el "genocidio" que cometió en el siglo XV contra pueblos americanos, incluyendo a Venezuela.
El Parlamento venezolano, controlado por el chavismo, emitió una exhortación al Gobierno español para que aboliera la monarquía, considerándola una institución relacionada con la corrupción y la ultraderecha. También se instó a Maduro a romper relaciones diplomáticas, consulares y comerciales con España. Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, respondió exigiendo a Venezuela que respetara las instituciones españolas ante las críticas y exhortaciones del Gobierno venezolano.
Cabello recordó un incidente en 2007 en el que Juan Carlos I mandó callar al entonces presidente Hugo Chávez durante un discurso, lo cual ha sido recordado como un punto de conflicto entre ambos países. El ministro de Interior y Justicia venezolano no dudó en calificar al rey emérito como un "vagabundo" que huyó por el mundo debido a sus supuestos actos de corrupción. Cabello cuestionó la utilidad de tener un rey en la actualidad, argumentando que la figura monárquica proviene del fascismo de Franco y no es aceptada en Venezuela.
Las tensiones entre Venezuela y España han escalado debido a las declaraciones y acciones de ambos gobiernos. Mientras el chavismo en Venezuela critica la monarquía española, el Gobierno español exige que se respeten sus instituciones. Estos enfrentamientos políticos han generado un clima de desconfianza y confrontación entre ambas naciones, a pesar de los lazos históricos y culturales que las unen. Es importante mantener un diálogo abierto y constructivo para superar estas diferencias y promover la cooperación en beneficio de ambas sociedades.