El Sindicato de Camioneros del Aeropuerto Cabo Rojo en Tres Charcos realizó un paro en protesta por el incumplimiento de pagos relacionados con el acarreo del material de relleno para la construcción del aeropuerto en Pedernales, a cargo de la empresa española Acciona. Los transportistas exigen una tarifa justa, ya que actualmente reciben solo 16 pesos por kilómetro, una cantidad que según ellos no cubre ni siquiera el costo del combustible de los camiones. Aclararon que su objetivo no es detener la construcción del aeropuerto, sino simplemente recibir una remuneración adecuada de acuerdo a lo establecido por la ley.

A pesar de haber detenido el transporte de materiales, los representantes de la empresa constructora aún no han respondido a las demandas de los camioneros. Ante esta situación, los transportistas advirtieron que si no son atendidos en los próximos días, paralizarán por completo las labores en la construcción del aeropuerto. Esta medida podría generar retrasos en la finalización del proyecto, lo cual preocupa a las partes involucradas en el mismo.

La desesperación en la comunidad de Oviedo por la entrega de títulos definitivos agrícolas es un tema de interés relacionado con la situación en Tres Charcos. La incertidumbre y la falta de respuestas por parte de las autoridades y empresas involucradas están generando tensiones en la zona. Es importante avanzar en la resolución de estas problemáticas para evitar conflictos mayores que puedan afectar el desarrollo y la estabilidad de la región.

Es fundamental que las autoridades y la empresa constructora dialoguen con los camioneros para encontrar una solución que satisfaga las necesidades de ambas partes. La paralización de las labores en la construcción del aeropuerto no solo afectaría a los transportistas, sino que también tendría consecuencias en el avance de la obra y en la economía local. Es necesario llegar a un acuerdo que sea justo y equitativo para todas las partes involucradas.

La cooperación y el diálogo son fundamentales para resolver conflictos como el que se está viviendo en Tres Charcos. La comunicación abierta y la búsqueda de soluciones consensuadas son clave para evitar situaciones de tensión y enfrentamiento. Esperamos que las partes involucradas puedan llegar a un acuerdo que permita reanudar las labores en la construcción del aeropuerto y garantizar un trato justo para los camioneros y sus familias. La estabilidad y el desarrollo de la región dependen de la capacidad de resolver estos conflictos de manera pacífica y justa.

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