Las instalaciones del Palacio Nacional, construido en 1947, actualmente se encuentran sobrepobladas, por lo que el Gobierno Central planea extender sus oficinas hacia la Casa de Vapor, un edificio en ruinas construido hace 88 años a 100 metros de distancia. El Ministerio de la Vivienda, Hábitat y Edificaciones (Mivhed) abrió un proceso de licitación para la construcción de la extensión de oficinas y servicios del Palacio Nacional Casa de Vapor, por un monto de 188,726,185.67 pesos. La compra del inmueble por 69 millones de pesos fue realizada por el Ministerio Administrativo de la Presidencia en septiembre de 2022 a la empresa Frajovic SRL. Esta adquisición se justificó debido al hacinamiento que sufre el Palacio Nacional.
La Casa de Vapor, dividida en la Casa Vapor Barco y la Casa Vapor Edificio, fue construida en 1936 por el arquitecto Henry Gazón Bona y aún evoca recuerdos en aquellos que solían visitarla en la década de 1970. El edificio cuenta con 2,198.90 metros de construcción, lo que lo hace ideal para albergar oficinas y salones de reuniones. Se prevé la adecuación de al menos 31 oficinas en las que laborarían aproximadamente 200 personas. El Ministerio de la Presidencia destaca la cercanía del inmueble y la capacidad que tiene para desocupar espacios que generan hacinamiento en el ámbito laboral.
El Ministerio de la Presidencia detalla en el acta de adjudicación de la compra que requiere de espacios físicos funcionales y suficientes para facilitar las actividades, programas y servicios que brinda en apoyo a la Presidencia. Se menciona que el espacio físico en el Palacio Nacional es insuficiente para albergar de manera digna a todos los servidores públicos y bienes propios de ese ministerio y sus dependencias. Por ello, se busca descargar la congestión del Palacio Nacional utilizando la Casa de Vapor y otros inmuebles disponibles para futuras negociaciones.
Para determinar el monto del inmueble, el Mapre encargó una tasación por 103,840 pesos a la Red Inmobiliaria en la Nube, SRL. La decisión de adquirir la Casa de Vapor se basó en la necesidad de contar con espacios suficientes y funcionales para llevar a cabo las actividades relacionadas con la Presidencia. Se busca mejorar las condiciones laborales de los colaboradores y brindar un ambiente adecuado para el desarrollo de las labores administrativas. Con la ampliación de las oficinas hacia la Casa de Vapor, se espera aliviar el hacinamiento en el Palacio Nacional y mejorar el desempeño de los trabajadores del Gobierno Central.