El Gobierno de Cuba considera que la evolución económica sigue siendo desfavorable, a pesar de una ligera mejora en el turismo, en el cuarto año de una grave crisis en la isla. El ministro de Economía y Planificación, Joaquín Alonso Vázquez, señaló que la economía nacional muestra un panorama desfavorable con disminución de ingresos por exportaciones, caída en las importaciones, pérdidas en empresas estatales y incumplimiento de planes de producción agrícola y generación eléctrica. También destacó la depreciación del peso cubano y el aumento de precios debido a la importación del 80% de los alimentos consumidos en el país.
A pesar de los aspectos negativos, se destacó el comportamiento positivo de las exportaciones de servicios clave en Cuba, como los médicos, turísticos y de telecomunicaciones. Además, se resaltó un aumento en el número de turistas en comparación con el año anterior, aunque se encuentra por debajo de las expectativas para este período del año. La economía cubana ha enfrentado una crisis en los últimos cuatro años debido a la combinación de la pandemia, sanciones estadounidenses más estrictas y errores en la política económica nacional.
La crisis ha traído escasez de productos básicos como alimentos, combustible y medicinas, así como apagones frecuentes, inflación alta y una creciente dolarización de la economía. Esta situación ha generado descontento social en la isla, manifestado en protestas antigubernamentales pacíficas pero inéditas, y en una migración sin precedentes. La Unión Eléctrica de Cuba prevé apagones en el 24% de la isla, reflejando la grave situación energética en el país.
El Gobierno cubano busca mejorar la situación económica a través de medidas como el control del tipo de cambio y una mayor eficiencia en la producción agrícola y energética. Sin embargo, la dolarización de la economía y la dependencia de las importaciones continúan siendo desafíos importantes. Se espera que el turismo siga siendo un sector clave para la economía cubana, a pesar de los desafíos actuales.
En resumen, la economía cubana se enfrenta a una crisis profunda que ha sido agravada por la pandemia, sanciones internacionales y errores en la política económica nacional. A pesar de algunos aspectos positivos en el sector turístico y de servicios, la situación general sigue siendo desfavorable con escasez de productos básicos, inflación y dolarización. El Gobierno cubano busca implementar medidas para mejorar la situación económica del país, pero los desafíos persisten y han generado descontento social y migración.