En diciembre, el Ministerio de la Presidencia de la República Dominicana finalizó un contrato con la firma consultora estadounidense Dentons Global Advisors, por un valor superior a los RD$ 85 millones. El acuerdo, que abarca catorce meses, tiene como objetivo abordar temas relacionados con los derechos humanos y gestionar los riesgos reputacionales asociados con el gobierno dominicano. Joel Adrián Santos Echavarría, ministro interino del Ministerio de la Presidencia, y José Miguel Vivanco Inostroza, en representación de Dentons Global Advisors, firmaron el acuerdo bajo el Procedimiento de Excepción de Trabajo Científico, con el número de referencia MINPRE-2023-41.
El gobierno del presidente Luis Abinader ha enfrentado escrutinio por sus políticas de inmigración con Haití, presuntas ejecuciones extrajudiciales involucrando a las fuerzas de seguridad y las condiciones dentro de las cárceles del país. Recientemente, un incendio en la cárcel de La Victoria resaltó preocupaciones sobre el hacinamiento, las condiciones insalubres y la supervisión inadecuada por parte de las autoridades. Diversos actores, incluyendo la Defensoría Pública, el Observatorio de Derechos Humanos, portavoces judiciales y periodistas, han pedido soluciones y una reevaluación de las políticas carcelarias.
Dentons Global Advisors, afiliada a la firma de abogados más grande del mundo, Dentons, ofrece asesoría integral y estrategias de comunicación para gestionar crisis, disputas y problemas complejos. La firma busca proteger la reputación de las marcas de sus clientes y mitigar las consecuencias legales o impactos negativos. José Miguel Vivanco, en representación de Dentons Global Advisors, ha estado asociado con la empresa de asesoría desde 2022. Obtuvo reconocimiento internacional durante su mandato como director de Human Rights Watch (HRW) en Washington durante tres décadas.
La participación de Vivanco en la defensa de los derechos de los descendientes "denacionalizados" de haitianos en la República Dominicana generó controversia en 2015. Criticó al país por negar derechos de nacionalidad a decenas de miles de individuos y destacó las prácticas de detención y expulsión del gobierno. Además, Vivanco ha sido un defensor destacado de los derechos LGBT, condenando las batallas ideológicas promovidas por ciertos sectores, particularmente aquellos asociados con la iglesia evangélica en países latinoamericanos. Argumenta que tales posturas socavan los derechos de las minorías sexuales y los derechos reproductivos de las mujeres, enfatizando la necesidad de reformas políticas para lograr cambios significativos.
