El autor de este artículo critica la tendencia de algunas personas a desestimar a aquellos con ideas brillantes catalogándolos como "teóricos". Se enfoca en teorizar sobre el Movimiento Deportivo Nacional en la República Dominicana, especialmente el aspecto olímpico y federativo, que recibe la mayor parte del presupuesto asignado al Ministerio de Deportes.

Se hace una comparación con el Mayo Francés de 1968, donde el Movimiento Estudiantil en Francia desafió al presidente Charles de Gaulle, y los jóvenes alemanes interrogaron a sus padres sobre su participación en el holocausto. Se sugiere que en la República Dominicana debería surgir un Movimiento Deportivo contracultural que cuestione el manejo de los recursos destinados al deporte olímpico, que actualmente es controlado por una élite sin transparencia.

Se critica la falta de transparencia de los líderes olímpicos en informar al país sobre el uso de los recursos millonarios destinados al deporte. Se menciona que en la República Dominicana se conoce más al secretario general del Comité Olímpico Dominicano que a los propios deportistas dominicanos exitosos. Se destaca la importancia de que surja un Movimiento contracultural en el Movimiento Olímpico que adopte una postura crítica hacia los miembros actuales del COD y busque reformas necesarias.

Se menciona la importancia de la imaginación y la valentía para desafiar a las estructuras establecidas, como lo hicieron los jóvenes del Mayo Francés. Se plantea la posibilidad de que surja un movimiento contracultural en el ámbito deportivo en la República Dominicana, aunque reconociendo que puede llevar tiempo crear una conciencia histórica al respecto. Se critica el miedo de dirigentes deportivos valiosos que no se atreven a cuestionar el funcionamiento del Comité Olímpico Dominicano y proponen que en el año 2026 se pueda ver un cambio en la dirección del COD.

En conclusión, el autor aboga por la necesidad de un cambio en el Movimiento Deportivo Nacional en la República Dominicana, especialmente en el ámbito olímpico y federativo, para que se realice una gestión más transparente y justa de los recursos destinados al deporte. Se propone la creación de un Movimiento Deportivo contracultural que desafíe a la élite actual del deporte olímpico y busque reformas necesarias para promover una mayor participación y reconocimiento de los deportistas dominicanos. Se espera que en el futuro se pueda ver un cambio significativo en la dirección del Comité Olímpico Dominicano y en la forma en que se gestiona el deporte en el país.

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