En Santiago, los conductores de la ruta "CJ27″ han comenzado a cobrar 5 pesos más por pasaje, elevándolo de 35 a 40 pesos por pasajero. El secretario general de la Confederación de Organizaciones del Transporte (Conatra), a la que pertenece esta ruta, ha declarado que el aumento no fue autorizado por la entidad, y planea convocar a una reunión para resolver el problema si algún otra ruta decide aumentar el precio de los pasajes de forma unilateral.

Los pasajeros se han resistido a pagar los 40 pesos argumentando que no han recibido aumentos en sus salarios, lo cual dificulta para ellos pagar un costo adicional en el transporte. La ruta CJ27 recorre la avenida 27 de Febrero en la ciudad, abarcando múltiples barrios y urbanizaciones en las partes Este y Oeste, como Hoya del Caimito, Villa Progreso, Cerro Hermoso, Dorado Dos, y concluyendo en sectores de la parte baja como La Joya y Baracoa. Mientras tanto, otras rutas de transporte urbano mantienen el costo del pasaje en 35 pesos.

Además de Conatra, en Santiago también están organizaciones como la Federación Regional Norte del Transporte (Fettranreno) y la Central Nacional de Trabajadores del Transporte (CNTT) que tienen control sobre el transporte público urbano en la ciudad. Estas entidades juegan un papel importante en la regulación y organización de las tarifas de transporte, por lo que será crucial la intervención de las mismas para resolver la controversia en torno al aumento de precio en la ruta CJ27.

La resistencia de los pasajeros a pagar el aumento en el pasaje demuestra la importancia de considerar el impacto económico en la población al momento de decidir incrementos en las tarifas de transporte. Ante la falta de autorización de Conatra, es fundamental llegar a un consenso entre todas las partes involucradas para encontrar una solución que beneficie tanto a los conductores como a los usuarios del transporte público en Santiago.

La posibilidad de convocar a una reunión para resolver el problema es un paso en la dirección correcta, ya que permitirá discutir de manera colaborativa y encontrar una solución que sea justa y equitativa para todas las partes involucradas. La coordinación entre las diferentes organizaciones de transporte en la ciudad será fundamental para garantizar una respuesta colectiva y efectiva a este tipo de situaciones que afectan a la población y a la industria del transporte en general.

En última instancia, la regulación y supervisión de las tarifas de transporte en Santiago es fundamental para garantizar un servicio accesible y equitativo para la población. El diálogo y la colaboración entre los diferentes actores involucrados en el sector del transporte serán clave para abordar de manera efectiva los desafíos y conflictos que puedan surgir en relación con las tarifas y los precios en el transporte público de la ciudad.

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