En Nueva York, uno de cada cuatro residentes informó que sufre de inseguridad alimentaria en los últimos 12 meses, pero el Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) proporciona ayuda a aquellos que enfrentan esta situación. Cerca de 1.8 millones de personas, incluyendo decenas de miles de dominicanos, reciben beneficios a través de este programa en la Gran Manzana. Financiado por el gobierno federal pero administrado por la ciudad de Nueva York, SNAP es el programa de asistencia nutricional más grande del país, representando el 65% del gasto en asistencia nutricional del USDA en el año fiscal 2022. En promedio, atiende a 41.2 millones de personas al mes, con un gasto federal total de $119.5 mil millones y beneficios mensuales promedio de $230.88 por participante.
El Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) es una agencia federal encargada de realizar investigaciones, análisis y producir datos sobre agricultura, alimentos, medio ambiente y zonas rurales, pero no procesa solicitudes de SNAP. A nivel nacional, el 12.4% de los residentes de EE. UU., incluyendo los 50 estados, Washington DC, Guam y las Islas Vírgenes, recibieron beneficios de SNAP en el año fiscal 2022. La proporción de residentes que recibieron estos beneficios varía en cada estado, oscilando entre el 24.5% y el 4.6%. Para realizar una solicitud al programa, los interesados pueden solicitar en línea a través de ACCESS HRA en www.nyc.gov/accesshra, llamar al 311 o a la línea de información de la HRA al 718-557-1399 para obtener la solicitud e información.
SNAP desempeña un papel fundamental en la lucha contra la inseguridad alimentaria en Nueva York y en todo el país, brindando beneficios a millones de personas en situaciones de necesidad. Este programa es esencial para garantizar que las personas tengan acceso a alimentos nutritivos y suficientes para satisfacer sus necesidades básicas. A través de SNAP, se busca reducir la pobreza y mejorar la salud y calidad de vida de los beneficiarios.
La participación en SNAP varía en cada estado de EE. UU., reflejando las diferentes tasas de inseguridad alimentaria y necesidades de la población en cada región. En Nueva York, la cantidad de personas beneficiarias refleja la gran cantidad de residentes que sufren de inseguridad alimentaria. El programa ayuda a atender estas necesidades, pero es importante seguir trabajando en la reducción de la inseguridad alimentaria y la pobreza en la ciudad y en todo el país.
Con el apoyo de SNAP, los beneficiarios pueden acceder a alimentos básicos y nutritivos que de otra manera no podrían adquirir, lo que les ayuda a mantener una alimentación adecuada y saludable. La combinación de asistencia alimentaria y educación nutricional puede ser crucial para mejorar la calidad de vida de las personas en situación de vulnerabilidad. Además, SNAP contribuye a fortalecer la economía local al aumentar la demanda de alimentos y beneficiar a los comerciantes que participan en el programa.
En conclusión, SNAP desempeña un papel crucial en la lucha contra la inseguridad alimentaria en Nueva York y en todo Estados Unidos, brindando ayuda a millones de personas en situaciones de necesidad. A través de este programa, se busca garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a alimentos suficientes y nutritivos para satisfacer sus necesidades básicas. Es fundamental seguir trabajando en la reducción de la inseguridad alimentaria y la pobreza en todas las comunidades, para lograr una mayor equidad y bienestar para todos.