El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, informó que el huracán Milton ha causado daños estimados en 50.000 millones de dólares al golpear Florida, provocando inundaciones, destrucción y al menos 16 muertes. Biden se dirigió a los afectados por el huracán y aseguró que el Gobierno federal hará todo lo posible para ayudarles a recuperarse. El huracán tocó tierra la noche del miércoles en Siesta Key, cerca de Sarasota, con vientos máximos sostenidos de 205 kilómetros por hora, categoría 3, y salió por la costa este al Atlántico la mañana del jueves.
El huracán Milton no ocasionó el peor escenario previsto, aunque dejó destrucción en algunas áreas y al menos 16 muertes, en su mayoría causadas por tornados en el centro y sur del estado. Según PowerOutage, más de 2,2 millones de clientes de Florida se encontraban sin electricidad, especialmente en los condados afectados por el trayecto de Milton. Este huracán es el segundo que alcanza Florida en casi dos semanas, luego del impacto del poderoso huracán Helene, que entró por el noroeste del estado con categoría 4 el pasado 26 de septiembre y dejó una estela de devastación en seis estados del sureste de EE. UU. y más de 230 muertos.
Joe Biden viajará a Florida el domingo para examinar los daños causados por el huracán Milton y supervisar los esfuerzos de recuperación. La vicepresidenta Harris también se unió a la conferencia telefónica sobre los esfuerzos de recuperación en Washington. El Gobierno federal ha prometido hacer todo lo posible para ayudar a los afectados a recuperarse de la devastación causada por el huracán. Los residentes a lo largo del río Alafia han tenido que usar botes como medio de transporte debido a las inundaciones provocadas por el huracán Milton en Lithia, Florida.
El huracán Milton ha dejado una gran cantidad de daños materiales en Florida, estimados en 50.000 millones de dólares, siendo uno de los desastres naturales más costosos en la historia de Estados Unidos. A pesar de no haber causado el peor escenario previsto, el huracán ha dejado destrucción en algunas áreas y ha causado al menos 16 muertes. Más de 2,2 millones de clientes en Florida se encontraban sin electricidad, especialmente en los condados afectados por el paso del huracán. La ayuda del Gobierno federal es crucial para la recuperación de los afectados.