Adrián Beltré, jugador de béisbol dominicano, expresó su emoción por ser exaltado al Salón de la Fama de las Grandes Ligas, considerándolo como el punto más alto de su carrera. Beltré se unió a otros dominicanos en el Salón de la Fama, como Juan Marichal, Pedro Martínez, Vladimir Guerrero y David Ortiz. Durante la ceremonia de exaltación, Beltré compartió escenario con otros miembros del Salón de la Fama, lo que le generó una gran emoción al verse rodeado de sus ídolos.
Previo a su discurso de exaltación, Beltré fue tocado en la cabeza por David Ortiz, también miembro del Salón de la Fama. A diferencia de su reacción durante su carrera, Beltré aceptó la broma de Ortiz con buen humor, expresando que no había problema y que Ortiz tenía "pase de por vida" para hacer lo que quisiera con él. Beltré reconoció la importancia de su esposa, Sandra, durante sus 21 años en las Grandes Ligas, agradeciéndole públicamente por haber sido un pilar fundamental en su carrera al encargarse de las responsabilidades familiares.
Durante su encuentro con la prensa, Beltré destacó el apoyo y la labor de su esposa, resaltando que ella fue quien se encargó de hacer su vida más fácil para que él pudiera desempeñarse en su trabajo. También mencionó la importancia de expresarse en inglés y español durante su discurso de exaltación para dedicar momentos a personas clave en su carrera. Beltré afirmó haber dejado atrás los nervios y que ahora se sentaría a disfrutar de todo lo que ha pasado en su carrera.
Beltré expresó su orgullo por haber alcanzado el Salón de la Fama de las Grandes Ligas y afirmó que es un honor estar en él. Se mostró agradecido por el reconocimiento y emocionado por compartir escenario con otros miembros del Salón de la Fama durante la ceremonia de exaltación. La presencia de figuras como Todd Helton, Joe Mauer y Jim Leyland en la Clase 2024 del Salón de la Fama le llenó de emoción y significado a este logro en su carrera.
El dominicano reveló que los jugadores del Salón de la Fama siempre fueron sus ídolos y que verlos caminar por el mismo lugar que él era algo increíble. Su participación en la ceremonia, junto a otras leyendas del béisbol, le permitió experimentar un momento único en su carrera. Beltré concluyó expresando su deseo de disfrutar junto a su familia todo lo que ha pasado y de asimilar la magnitud de su exaltación al Salón de la Fama de las Grandes Ligas.
