Desde el 9 de agosto, el buque Karmol LNGT Powership Europe de la empresa Karpowership se encuentra anclado en el Malecón de Santo Domingo. A diferencia de las barcazas de generación eléctrica en Azua, este buque no tiene como destino final la República Dominicana, según la empresa de capital turco. El departamento de Comunicaciones de la empresa explicó que el buque realizará una parada en el país y luego se dirigirá a otro país, sin especificar por cuánto tiempo permanecerá en aguas dominicanas.
Karpowership ha señalado que el buque Karmol LNGT Powership no desempeña las mismas funciones que las barcazas de Azua, ya que está diseñado para almacenar e inyectar gas natural a plantas de generación eléctrica. La empresa turca ha estado operando en el país durante un año, después de ganar una licitación de emergencia para 400 megavatios, debido al déficit energético que enfrenta la nación. Las barcazas en Azua han proporcionado el 6% de la demanda nacional de energía de la República Dominicana, según datos de la empresa operadora y del Organismo Coordinador del Sistema Eléctrico Nacional Interconectado.
La presencia del buque Karmol LNGT Powership en aguas dominicanas ha generado interés y preguntas sobre su función y su tiempo de permanencia en el país. Se desconoce cuál será su próximo destino después de su parada en Santo Domingo. La empresa Karpowership ha destacado que la embarcación tiene la capacidad de almacenar gas natural y suministrarlo a plantas de generación eléctrica, lo que la diferencia de las barcazas estacionadas en Azua.
La empresa turca Karpowership ha sido parte del panorama energético de la República Dominicana durante el último año, proporcionando una solución temporera al déficit energético del país. Sin embargo, la presencia del buque Karmol LNGT Powership en aguas dominicanas plantea interrogantes sobre sus operaciones futuras y su impacto en el suministro energético del país. Aunque las barcazas de Azua han contribuido significativamente al abastecimiento de energía, la función y el papel del buque Karmol siguen siendo motivo de debate y análisis. La industria energética dominicana deberá seguir de cerca el desarrollo de esta situación para entender su impacto a largo plazo.
