La Dirección General de Migración (DGM) continuó sus operaciones durante el fin de semana para deportar hasta 10,000 extranjeros por semana, como parte de una iniciativa anunciada por el Presidente Luis Abinader. El Vicealmirante Luis Rafael Lee Ballester, director de la DGM, enfatizó que todas las acciones se llevan a cabo con respeto a los derechos humanos y uso proporcional de la fuerza. Algunas personas con documentos fueron detenidas por no proporcionar una identificación creíble para justificar su presencia en la República Dominicana, y los menores detenidos son tratados de acuerdo con la Ley 136-03, trabajando en conjunto con el Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (Conani) para garantizar sus derechos y seguridad.
Desde el lanzamiento de la campaña el 1 de octubre, un total de 9,117 extranjeros han sido deportados y repatriados, siendo 7,217 de ellos parte de los recientes esfuerzos de interdicción a gran escala. Estas operaciones cuentan con el apoyo de diversas fuerzas de seguridad, incluyendo las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional y la Fiscalía.
En otras noticias, la DGM anunció que extenderá hasta el 10 de diciembre el plazo para la renovación de carnets de residencia de extranjeros, a petición de la comunidad haitiana y otros grupos de inmigrantes. Este proceso de renovación puede hacerse en línea a través del portal electrónico de la institución, así como en las oficinas de la DGM a nivel nacional.
Asimismo, el director de la DGM destacó que la institución no escatimará esfuerzos para garantizar la legalidad de la inmigración en el país y mantener un control efectivo de la entrada y salida de extranjeros. Aseguró que todas las actuaciones se realizan con pleno respeto a los derechos humanos, evitando cualquier tipo de abuso o violación de la ley. Se espera que estas medidas contribuyan a fortalecer la seguridad y el control migratorio en la República Dominicana.
El Gobierno dominicano ha reiterado su compromiso con una política migratoria basada en el respeto a la ley y los derechos humanos, buscando regularizar la situación de los extranjeros que residen en el país de manera legal. A través de estas operaciones de deportación y repatriación, se busca enviar un mensaje claro a aquellos que se encuentran en situación migratoria irregular y fomentar un marco de legalidad y orden en materia migratoria. La cooperación entre diversas instituciones y fuerzas de seguridad es fundamental para garantizar el éxito de estas acciones y mantener el control efectivo sobre la migración en el territorio nacional.