En los últimos 13 meses de gestión del vicealmirante Agustín Morillo Rodríguez al frente de la Comandancia de la Armada Dominicana, se han detenido y sometido a la justicia a unos 115 traficantes de ilegales a Puerto Rico, incluyendo capitanes de embarcaciones e intermediarios. Muchos de los arrestados se encuentran actualmente en diferentes cárceles del país, en su mayoría en las zonas este y nordeste, donde operaban gran parte de los grupos dirigidos por los individuos procesados.
Los operativos de captura de traficantes de ilegales y el desmantelamiento de los grupos criminales fueron llevados a cabo por la Dirección de Inteligencia Naval M-2 en colaboración con el Departamento de Operaciones. Un informe de la Armada indica que, como resultado de estas acciones, se ha contado con el apoyo total de las autoridades judiciales de las diferentes jurisdicciones donde se llevaron a cabo las detenciones.
La mayoría de los operativos en contra de los viajes ilegales a Puerto Rico se realizan en zonas como San Pedro de Macorís, La Romana, Higüey, Bayahíbe, Miches, Sabana de la Mar, así como en los municipios de Puerto Plata, Sánchez, Samaná, Río San Juan y otras localidades. Además de los organizadores y capitanes de las embarcaciones, entre los detenidos también se encuentran individuos que se encargaban de reclutar personas interesadas en viajar a Puerto Rico, especialmente en áreas rurales de las regiones este, nordeste y sur.
Los traficantes cobran a las personas interesadas en viajar a Puerto Rico en yolas cantidades que oscilan entre los 400, 500 y a veces hasta 600 mil pesos, sin embargo, muchas de estas personas terminan perdiendo su dinero al no lograr llegar a la isla como esperaban. La lucha contra este tipo de tráfico ilegal es una prioridad para las autoridades dominicanas, y se han tomado medidas severas para detener a los responsables y desmantelar los grupos que se dedican a esta actividad ilegal.
El trabajo conjunto entre la Armada Dominicana y las autoridades judiciales ha sido fundamental para lograr los arrestos y sometimientos a la justicia de los traficantes de ilegales. La colaboración entre diferentes entidades ha permitido desarticular grupos criminales y prevenir la salida ilegal de personas hacia Puerto Rico. Estas acciones han contribuido a fortalecer la seguridad en las zonas costeras y a disuadir a aquellos que intentan sacar provecho de las personas que buscan una vida mejor en el territorio puertorriqueño.
La labor de las autoridades dominicanas en la lucha contra el tráfico ilegal de personas hacia Puerto Rico es fundamental para proteger la seguridad de la población y prevenir tragedias en alta mar. El compromiso de las instituciones encargadas de hacer cumplir la ley es clave para mantener el orden y garantizar el respeto de los derechos humanos de quienes buscan nuevas oportunidades en otros países. La detención de traficantes y el desmantelamiento de grupos delictivos es un paso importante en la lucha contra este tipo de actividades ilícitas en la región.