El ministro de Energía y Minas, Antonio Almonte, cuestionó las razones detrás del incremento del déficit financiero de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (EDE) en los últimos tres años, señalando que el aumento en los precios de los combustibles en el mercado internacional fue la principal causa. Durante su participación en el congreso "Economía y energía" organizado por la Universidad Autónoma de Santo Domingo, Almonte destacó que el déficit financiero operativo de las distribuidoras alcanzó los 867 millones de dólares en 2021, con una tasa de pérdidas del 32.6 %, y que este ha aumentado a más de 1,300 millones de dólares en 2022, con un nivel de pérdidas del 32.4 %.
En abril de 2024, las pérdidas del sector eléctrico se ubicaron en un 37.1 %, lo que representó un incremento de 10.3 % con respecto al año anterior. Según el Informe de Desempeño del Sector Eléctrico del Ministerio de Energía y Minas, el déficit entre la compra y la venta de energía de las EDE fue de 265.8 millones de dólares en los primeros cuatro meses de 2024, lo que significó una disminución del 41.4 % con respecto al mismo período del año anterior.
Antonio Almonte calificó de "relato sencillo" la idea de que el aumento del déficit financiero se debió únicamente a las pérdidas energéticas, señalando que es necesario analizar otros factores determinantes. Destacó que el principal factor detrás de este incremento fue el aumento en los precios de los combustibles en el mercado internacional, especialmente debido al precio del gas natural y los efectos de la guerra en Ucrania. Además, mencionó que las EDE estaban comprando energía a precios igual o menores a los que se les vendía a los consumidores, lo cual generaba una situación insostenible para las empresas.
El ministro enfatizó que la República Dominicana depende de la importación de gas natural, petróleo y carbón para la producción energética, lo que la hace vulnerable a las fluctuaciones de precios en el mercado internacional. Esta dependencia representa serias restricciones en términos de costos y almacenamiento, por lo que el Gobierno ha implementado subsidios para contener los precios de los combustibles y evitar que afecten su venta en el mercado interno. A pesar de estos esfuerzos, las distribuidoras de electricidad continúan presentando pérdidas por encima del 35 %, lo que indica la complejidad de la situación en el sector energético.
En resumen, el análisis del ministro Almonte pone en relieve la necesidad de comprender los múltiples factores que contribuyen al déficit financiero de las Empresas Distribuidoras de Electricidad, destacando la importancia de considerar los precios en el mercado internacional, la situación energética del país y la implementación de medidas como los subsidios para mitigar las pérdidas. La situación actual del sector eléctrico dominicano requiere de estrategias integrales y sostenibles para garantizar un suministro eléctrico eficiente y asequible para la población.
