El Departamento de Salud (DS) de Puerto Rico emitió un aviso a los profesionales sanitarios para estar alerta al contagio del virus del oropouche, con más de 8.000 casos confirmados en algunos países de América. Se busca una respuesta coordinada y eficaz frente a la posible introducción del virus en la isla, enfatizando la importancia de mantenerse preparados y notificar cualquier caso sospechoso.

En lo que va de año, se han reportado 8.078 casos confirmados del virus oropouche en países como Bolivia, Brasil, Colombia, Cuba y Perú. En Estados Unidos y Europa se han identificado casos importados en viajeros que visitaron Cuba y Brasil. Ante esto, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han emitido alertas de viajero para Cuba y América del Sur. El DS cuenta con un Sistema de Vigilancia de Enfermedades Arbovirales para monitorear posibles casos sospechosos de oropouche en la isla.

El virus del oropouche es transmitido por mosquitos y otros insectos, siendo el principal transmisor en áreas urbanas el maje, y en Puerto Rico el mosquito Culex quinquefasciatus. El periodo de incubación del virus es de tres a 10 días, con síntomas iniciales como fiebre, dolor de cabeza, muscular y articular. Aunque la mayoría de los casos son leves, se han reportado complicaciones graves, incluyendo casos hemorrágicos y neuroinvasivos.

Aunque no se han identificado casos importados en Puerto Rico, el riesgo de introducción del virus aumenta debido a la alta actividad arboviral y las condiciones ambientales actuales. La recomendación de la principal oficial de Epidemiología del DS es que los proveedores de salud consideren el historial de viaje de los pacientes y estén alerta a cualquier sospecha de oropouche en aquellos con síntomas compatibles, notificando a la vigilancia de enfermedades arbovirales para coordinar el diagnóstico.

El DS está trabajando en conjunto con los CDC para la validación de una prueba diagnóstica en Puerto Rico, con el fin de fortalecer la detección del virus del oropouche en la isla. La colaboración entre ambas instituciones se centra en mantener un monitoreo continuo de posibles casos sospechosos y en asegurar una respuesta eficaz ante la posible introducción del virus en Puerto Rico, ante el aumento del riesgo debido a condiciones favorables para la propagación del virus. Los profesionales sanitarios son clave en esta tarea de prevención y detección temprana.

Compartir.
Exit mobile version